Ivett Bermea: la señora de la casa… De Don Chito
Por Oscar Díaz Salazar
En el manejo de las redes sociales de la pre candidata (única) del Partido Acción Nacional a la presidencia municipal de Matamoros, Ivett Bermea, aplica a la perfección esa expresión que señala «dime de lo que presumes, y te diré de lo que careces».
Dos estrategias de comunicación son las más empleadas por los aspirantes a cargos de elección popular que pretenden mostrarse cercanos al pueblo, y que para ese propósito simulan acciones y prácticas que son ajenas a sus rutinas, su personalidad y sus preferencias. Una es la estrategia garnachera y la otra, la que más utiliza Ivett Bermea, es la estrategia «soy la señora de la casa».
Son varios los políticos, de todos los partidos, los que han empleado la estrategia de comunicación, que un compañero muy incisivo bautizó como «garnachera», y que se la ha endosado en forma particular a la diputada Carmen Lilia Cantú Rosas, aunque, para ser justos, se debe reconocer que muchos la utilizan.
El mensaje garnachero consiste en publicar fotografías, en las redes sociales, tomadas en los comederos, taquerías, venta de gorditas, fondas y cocinas económicas, -en las más apreciadas por el pueblo-, para mostrar a los seguidores que el politic@ es una persona común, es raza y aprecia las delicias gastronómicas que consume el «infeliciaje».
La Chita Bermea, esposa del «Chito» Carlos García, nos ha compartido, al menos en dos ocasiones desde que se hizo público que el dedazo vacuno le había favorecido, fotografías tomadas en un supermercado, en las que simula estar haciendo las compras de víveres para la familia.
Ir al mandado, ir de compras, hacer la nota, ir al súper, ir de shoping, ir al mercado, ir a la tienda, ir a Soriana (o Smart, HEB, Mi Tiendita, Guajardo, etc), son acciones que forman parte de la rutina de las familias de clase media o baja de las ciudades de Tamaulipas.
Los más pudientes, los de más solvencia económica, compran sus alimentos en Estados Unidos o mandan a sus empleados a la tienda. Obvio es que los residentes de Estados Unidos, como es el caso de los Chitos, no conocen los supermercados de Matamoros.
Nada tengo en contra de las señoras que van al súper a comprar los alimentos y productos que necesitan o de los señores que le empujan el carrito a la señora, o viceversa. Destaco ese afán de los políticos, como la Chita Bermea, de fingir algo que no son, de simular, de engañar, de no reconocer lo que sí son, lo que tienen y lo que han sido.
O tal vez estoy interpretando mal y en efecto la Señora Bermea es una ama de casa, totalmente ajena a la política, la administración y el servicio público, que logró ser candidata a la presidencia municipal, en razón de esa visión patrimonialista que tienen los panistas, de la política y la administración pública. Ivett Bermea es la señora de la casa, de Don Chito García, y el señor García, ante el rechazo de los electores matamorenses, decidió proponer a su señora.