Al no permitir las posadas y reuniones, artesanos y vendedores que dependen de las piñatas vieron mermados sus ingresos
23/12/2020 21:07 MARÍA DE LOS ÁNGELES VELASCO
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NEZAHUALCÓYOTL, Estado de México.
La pandemia no sólo está acabando con la salud de los mexicanos, sino sepultando las tradiciones. En calles, mercados y bodegas quedaron miles de piñatas, al no permitirse las posadas y reuniones.
La familia Díaz que por décadas se ha dedicado a la elaboración de piñatas bajó su producción, el año pasado fabricaron cerca de tres mil piezas y las vendieron todas, pero este 2020, la producción no fue mayor a mil.
Yuritzi Díaz explicó que en años anteriores sus productos incluso eran exportados, pero debido a las restricciones que hay en todo el mundo, se paró su venta y los compradores bajaron.
Ahorita si ha bajado bastante, por esto mismo de la pandemia, no mucha gente esta llevando sus piñatas, ahora si muchos se detienen más porque obviamente ha bajado la economía, entonces ya no fácilmente quieren adornar hacer un gasto como en una piñata”, apuntó.
Recordó que la mayor venta se debía a las preposadas y posadas así como brindis que se realizaban, pero ahora incluso la economía de las personas ha mermado.
Pues ahorita fue el problema ese de la pandemia del coronavirus, no hay mucha realización de eventos sociales entonces no se podría exportar a otros lados, porque ahorita no va a haber reuniones, no pueden romper una piñata, las ventas bajan de hecho, es lo que nos comentaban de igual manera por eso bajó aquí las ventas ya que no van a permitir la realización de las famosas posadas, o el hecho nada más de quebrar una piñata no se va a permitir aquí, si bajó demasiado la venta”, lamentó.
Así, en las calles, los puestos están llenos de piñatas.
Normalmente compramos 80, ahorita no hemos vendido más que dos piñatas. Ahorita no nada, como ahorita se suspendieron las posadas si está muy crítico, la situación ha bajado demasiado… porque ni fruta para piñata hemos surtido, porque no se ha vendido para nada”, recordó Cruz Valdez, quien vende piñatas en la calle.
Roberta García, otra vendedora de piñatas comentó que ella al no tener recursos compraba pocas piñatas y las vendía todas, hoy no es así. “40 piñatas compraba y se vendían todas hasta el 24 antes de la pandemia, hoy ante esta pandemia no, ahora compré nada más 20 y de 20 no se ha vendido ni una, tengo todas, cuando antes se empezaba a vender.
Las pocas piñatas que se han vendido, consideran los vendedores que son como adorno porque no compran fruta, por lo que estiman que el covid-19 está acabando con las tradiciones.
