Los Rivera Schotte
Por: Oscar Díaz Salazar.
La muerte ha marcado la vida y obra (y fortuna) de los hermanos Rivera Schotte de Tampico, Tamaulipas.
Me refiero a los empresarios tampiqueños de nombre Jorge Rivera Schotte, dos hermanos que comparten nombre y apelativos, uno Federico y el otro Eduardo, como segundo nombre, que también comparten la habilidad para hacer grandes negocios «fondeando» campañas políticas y prestando sus nombres y sus empresas para esconder el origen de los recursos aportados a campañas, partidos políticos y candidatos.
Jorge Federico es actualmente gerente general de la COMAPA de la zona conurbada, por designación del primer hermano de Tamaulipas (no primero en tiempo, pero si en afecto). Hace poco más de un año recibió el nombramiento de gerente de la COMAPA, a pesar de no contar con los cinco años de experiencia, ni la formación profesional relacionadas con el objeto principal de la institución, como lo estipula el Estatuto Orgánico de la COMAPA. Federico Rivera Schotte no es arquitecto, ni ingeniero civil, ni ingeniero hidráulico, ni topógrafo, ni ingeniero mecánico; es Ingeniero en Sistemas.
De Jorge Eduardo, lo que encontramos en los registros de medios de comunicación digitales, es que se trata de un empresario, accionista y directivo de varias empresas, una de las cuales fue utilizada para triangular recursos de la empresa brasileña, ícono de la corrupción en el gobierno y en la política, Odebrecht, que tuvieron como destino final la campaña del finado Doctor Rodolfo Torre Cantú.
La muerte del candidato del PRI al gobierno de Tamaulipas, Dr. Rodolfo Torre Cantú, y el hecho de que su hermano Egidio desconoció los tratos hechos por su «hermanito» y por el partido que lo llevó a él a la gubernatura, dejó en calidad de pérdida total los trescientos cincuenta mil dólares que salieron de Odebrecht, pasaron por la empresa de Rivera Schote y fueron remitidos a la campaña del PRI.
La muerte de Rodolfo Torre significó una pérdida de 350 mil dólares para uno de los Rivera Schotte.
La muerte de otros, le resarciría tiempo después, y con creces, a los Rivera Schotte, en este caso a Jorge Federico, a quien se le adjudica beneficio por el deceso de un joven tampiqueño de apellido arabe, a quien le «administraba» su cuantiosa fortuna, sin más garantía y contrato que la palabra.
La muerte en tierras tapatías de un amigo, patrón y socio de Jorge Federico, le representó hartos beneficios al joven gerente de la COMAPA de la zona conurbada. Esa fortuna le permitió invertir fuerte en la campaña de los panistas, y en retribución le fue confiada la gerencia de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de la Zona Conurbada… «.
La bonita «amistad» que ha entablado con el senador de primera minoría, y el recuerdo de su generosidad, son los argumentos que tiene para aspirar a la presidencia municipal, y que alimentan el sueño guajiro que ronda en la cabeza de este broker de la política, al que sus múltiples detractores acusan de ser el cobra cuotas… Y no sólo de los recibos de agua y drenaje.