Se rebelan cámaras al retorno a semáforo rojo
Los organismos cúpula del sector empresarial en Tamaulipas se declararon en tácita rebelión ante el retorno al semáforo rojo ante la pandemia y al advertir que sería catastrófico imponerlo tras ocho meses de inactividad forzada exigió a las autoridades control sobre festejos y convivios y no concentrarse en los negocios, “que sí hemos cumplido con las regulaciones”.
En forma coincidente, dirigentes de la FECANACO, CANACO y CANIRAC de Victoria dejaron oír sus voces frente a los efectos de un repunte del Covid-19.
Abraham Rodríguez Padrón, director de la Federación de Cámaras de Comercio, dijo que se han estado reuniendo con las 12 cámaras que la integran en el Estado, para informarle a la Secretaría de Salud “que no estamos aflojando las medidas sanitarias y que el problema son las personas que andan en la calle porque piensan que ya no hay pandemia”.
“Siguen realizándose reuniones masivas, lo que puede condenar a las empresas que acaban de abrir hace apenas 15 días a que vuelvan a cerrar”, subrayó.
En Victoria, el líder de la CANACO, José Luis Loperena González, señaló que existe un abierto relajamiento social “y aunque todos quisiéramos estar ya en fase tres volver al nivel uno sería trágico para la economía local en general. Indicó que en Victoria se puede decir que la situación está en gran parte controlada, porque la capacidad hospitalaria no está saturada, “estamos dispuestos a hacer propuestas para aplicarlas en conjunto y reiterar que el uso del cubre bocas y la sana distancia, es lo más efectivo para reducir los contagios”.
Sin embargo, precisó que los operativos de persuasión y sensibilización van a la baja, sin contar que desde un principio fueron rebasados, porque carecieron de facultades para sancionar a quiénes incumplían con las medidas sanitarias.
Por su parte, Jorge Bello, presidente de CANIRAC Victoria reconoció que la situación es complicada en el centro del Estado y que en su sector se hace lo necesario y de hecho, dijo, ya reanudaron los operativos en los restaurantes para confirmar que se cumpla con las medidas sanitarias, “pero es un hecho que nadie quiere regresar a la fase uno y al semáforo rojo”, añadió.
Los negocios que han presentado fallas las están subsanando, “porque no hacerlo y retroceder en la reactivación los llevará a la quiebra”, concluyó.