Pandemia no frena deportación de niños por Nuevo Laredo
Sin embargo en el lado mexicano, fue necesario cambiar el protocolo para recibirlos; ahora deberán pasar por un periodo de cuarentena por precaución
Nueve de cada 10 niños repatriados por Nuevo Laredo durante este 2020, han llegado sin sus padres o algún adulto que los acompañe, aunado a que este fenómeno no disminuyó en las proporciones que contemplaba el CAMEF.
“En lo que va de este año hemos recibido a mil 544 menores, hemos visto incluso en meses atrás un breve repunte de niños y niñas que han cruzado. La pandemia no los ha frenado”, afirmó Candelaria de los Ángeles Espinoza Argüello, jefa del CAMEF en la ciudad.
El Covid-19 ha provocado que al ser entregados los menores migrantes al CAMEF, deben pasar un periodo en cuarentena en las instalaciones por precaución, pues los repatriados en repetidas ocasiones han argumentado que las autoridades migratorias estadounidenses no toman medidas sanitarias de monitoreo para verificar que no estén contagiados de coronavirus.
En los últimos meses varios menores han llegado con dengue a Nuevo Laredo, hasta el momento ninguno de ellos ha dado positivo a coronavirus, sólo un sospechoso que fue descartado e inmediatamente entregado a sus familiares.
“Los jóvenes que son incautados por las autoridades de Estados Unidos, inmediatamente son canalizados, los pasan directo y vienen con todo encima, agua, polvo, hacinados, todo lo que les sucede en el trayecto y el primer filtro es nuestro centro”, refirió.
Espinosa Argüello destacó que este año, se ha presentado un repunte de repatriados originarios de Chiapas. El 95 por ciento de los repatriados llega sin acompañamiento de adultos -solos-, de enero a octubre se han recibido alrededor de seis familias extranjeras, la más reciente de Honduras, que fue enviada el sábado a su país de origen.
Destacó que el proceso de repatriación se ha agilizado y hoy en día es de manera aérea, además de evitar el hacinamiento del albergue, teniendo como máximo un promedio de 18 personas con sus dormitorios debidamente acondicionados y el uso de cubrebocas obligatorio.