En Nuevo Laredo las defunciones por insuficiencia renal representan la octava causa de muerte, pues hasta una de cada 10 personas llegan a morir por este padecimiento; mientras que más de 3 mil 500 luchan por sobrevivir por complicaciones derivadas de la diabetes y la hipertensión arterial, en la que existe una lista de espera de más de 60 personas para poder recibir un trasplante de riñón.
Sólo en la Unidad de Medicina Familiar 78 del Seguro Social se tiene registro de 32 mil 840 pacientes con diabetes e hipertensión, de estos, más de mil sufren algún nivel de insuficiencia renal, entre los más drásticos (con daño renal severo) 296 derechohabientes, de los cuales 183 reciben hemodiálisis y 113 diálisis. Mientras que en la Unidad de Medicina Familiar 76 se tratan cerca de 629 pacientes y de manera particular mil 445.
Según estadísticas proporcionadas por la Secretaría de Salud, las muertes renales abarcaron durante 2019 el 3.7% de los pacientes que desarrollaron diabetes e hipertensión como consecuencia de la obesidad, mismas que se pudieron evitar al cambiar sus hábitos alimenticios y de ejercicio.
“En el IMSS contamos con programas de orientación para un mejor control de sus enfermedades incluso con nutriólogos para que tengan mejores hábitos y si bien por la pandemia la gente no acude de manera constante, se cuenta con medidas sanitarias bien establecidas para disminuir los riesgos de contagio”, expresó Julián del Carmen Granados, director de la UMF 78.
En el país se tiene una prevalencia del 13 por ciento de la población afectada por daños en los riñones, los dos factores asociados a la problemática renal son la diabetes y la hipertensión, aunque también hay otros factores como infecciones, cálculos y el uso de algunos medicamentos.
Otro factor es el envejecimiento; ya que cada vez se ven personas más longevas, esto también se asocia a la enfermedad crónica renal.
En México hay más de 10 millones de personas afectadas por esta enfermedad, de este porcentaje se tienen 102 mil personas en la última etapa de la enfermedad y aproximadamente 60 mil personas están recibiendo tratamiento dialítico.
Añadió que hay una lista de espera de alrededor de 12 mil pacientes de los que se encuentran en espera de un riñón en México; se tienen dos tipos de donaciones, uno es el donante cadavérico, así como el donante vivo, ellos cuentan con el protocolo del instituto.
“En Nuevo Laredo más o menos una de cada 10 personas afectadas por la enfermedad renal crónica fallecieron, y se estima que esto avance, porque la enfermedad progresa y es por etapas, es decir cada vez hay más gente enferma, afectada por la insuficiencia renal”, dijo.
Finalmente, exhortó a los derechohabientes a hacer uso del programa PREVENIMSS y cuiden su salud y no esperar a que se desarrolle la diabetes por no tener una buena calidad de vida; por lo que recomienda ejercitarse de manera diaria por una hora en casa y cambiar sus hábitos alimenticios, para ello pueden apoyarse en los especialistas del instituto.
