La liberación del hijo del ‘Chapo’ Guzmán fue sin duda una decisión amarga para las Fuerzas Armadas, lo que se tradujo en temor para las familias de los efectivos que viven en Culiacán
Culiacán, Sinaloa.- Tras el arresto y posterior liberación de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chapo’, las células criminales demostraron una capacidad que hasta el momento era poco valorada por las fuerzas de seguridad que se vieron superadas.
Tras los hechos, al menos 60 de 140 familias de militares abandonaron sus viviendas en el complejo habitacional militar de la Colonia 21 de Marzo, en la ciudad de Culiacán, para evitar represalias de los grupos armados.
Fuentes militares aseguraron que las familias fueron evacuadas y enviadas a la sede de la Novena Zona Militar para su tranquilidad. Según los testimonios de los vecinos de la zona, obtenidos por Reforma, muchas de las familias desplazadas se fueron con parientes y conocidos.
De igual manera se tuvo conocimiento de que el complejo fue atacado por un comando de presuntos integrantes del Cártel de Sinaloa el jueves pasado, esto a pesar de la llegada de refuerzos por más de 850 militares de élite en las últimas 48 horas a la capital sinaloense.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) señaló por su parte que el ataque ejecutado en la unidad habitacional, fue un acto de presión para que dejaran en libertad al hijo de Joaquín Guzmán.
Fuente: Tribuna
