Esperan se mantenga IVA al 8 %
Históricamente México, no sólo ha tenido una diferencia en el impuesto al valor agregado (IVA) en la frontera, además esta ha variado según decretos establecidos por mandatarios a lo largo de los años, lo cual ha generado competitividad con el comercio extranjero de los Estados Unidos, pero a la vez, también a causado inestabilidad en la mano de obra generada por las empresas locales.
De 1990 a 1994, la tasa en la frontera era de 6 por ciento, mientras que, en el resto del país, de 15 por ciento hasta 1991, y de 10 por ciento de 1992 a 1994. Posteriormente, de 1995 a 2009, la tasa en la frontera aumentó a 10 por ciento y la del resto del país a 15 por ciento. Finalmente, de 2010 a 2013, la tasa en la frontera fue de 11 por ciento, mientras que, en el resto del país, aumentó a 16 por ciento. No fue hasta la reforma fiscal de 2014 cuando se homologaron las tasas, siendo de 16 por ciento en todo el país.
Desde el 1 de enero del 2019, en los municipios de la franja colindante con Estados Unidos el Impuesto Sobre la Renta (ISR) se redujo 20 por ciento, al igual que el IVA, del 16 al 8 por ciento, pero esto bajo una modalidad de estímulo fiscal.
“Aunque la intención sea prorrogar dicho decreto, el problema es que como está cómo decreto y tiene una vigencia establecida hasta el 31 de diciembre, no tenemos la certeza de lo que vaya a suceder; es importante prolongar la vigencia de este decreto o plasmarlo en ley para efecto de no perder competitividad con empresas del extranjero”, expresó Martin Reinaldo Garza García, miembro de la Comisión Fiscal Del Colegio de Contadores de Nuevo Laredo.
La realidad actual de esta parte de la frontera norte del país, es que no ha sido exenta del quebranto económico generado por el Covid-19, más aún con el cierre de puentes internacionales para los viajes no esenciales, por lo tanto, la importancia de que la reducción de dichos impuestos queden como ley, contribuiría a que no se acreciente la situación.
“Si en la posición en la cual está actualmente la ley de ingreso de la federación, la miscelánea fiscal para el ejercicio 2021, tal vez ya no permite meterlo en ley, pues por lo menos que el Presidente de la República presente una prórroga al decreto autorizado hace dos años para efecto de poder seguir teniendo la vigencia y que el impacto económico en la frontera provocado por la pandemia no se acreciente provocando mayores gravámenes en el consumidor, que al final es el que termina siendo perjudicado con el IVA al 16 por ciento”, resaltó.
De esta misma manera, aunado con la competitividad y el desarrollo del comercio local que busca precisamente estas medidas en toda la frontera, permite que sean más las empresas y comerciantes que le apuesten sin miedo a pisar en un terreno inestable, y además generaría aumentar la mano de obra en la ciudad.
“Principalmente deberían de darle una certeza a los empresarios, generalmente si va a venir un empresario de fuera a instalar una empresa a Nuevo Laredo o a la frontera norte en general, planeando su presupuesto a una tasa del IVA del 8 por ciento y a una tasa del impuesto sobre la renta de dos terceras partes del resto de la República, el estar en ley te da una certeza de que al año siguiente no te van a decir que ya no; Un detonante al abrirse empresas, es que se genera más mano de obra, llevan más dinero a sus familias Y el engranaje económico se va moviendo de una manera más paulatina y mejor para todos”, explicó.
Agregó además que hasta la fecha no hay por parte del INEGI, algún informe económico que diga cuál ha sido el verdadero beneficio para el consumidor en toda la frontera norte, siendo éste un beneficio que sí es visible e importante para todos los que consumimos en la frontera.