Por:Mauricio Fernández Diaz
El plan está trazado. No de hoy; no es una ocurrencia más del Gobernador tamaulipeco Francisco García Cabeza de Vaca sino una estrategia planeada para amedrentar a sus adversarios políticos, a medios no oficialistas y periodistas críticos mediante el uso torcido de la ley como instrumento intimidatorio para cancelar con triquiñuelas legales tanto la participación de personajes incómodos para el Gobernador como para inhibir cualquier expresión crítica por parte de medios y periodistas a el, sus futuros candidatos y obviamente a su gobierno.
Esta red, está mafia que se encuentra apoderada de Tamaulipas utilizó ya a los diputados panistas para aprobar la llamada «ley garrote» que consiste básicamente en cancelar la participación electoral de cualquier ciudadano que se encuentre sujeto a investigación por parte de la Fiscalía General de Tamaulipas, a cargo de Irving Barrios Mojica.
Esto, que es inconstitucional a todas luces fue aprobado por la mayoría panista en el Congreso de Tamaulipas que preside Gerardo Peña Flores para poder utilizarla en las elecciones tanto del 21 como del 22 contra todo aquel personaje político que represente un potencial peligro para las ambiciones del Gobernador Cabeza de Vaca.
A la par, ya varios periodistas críticos de la administración del Gobernador tamaulipeco han recibido documentos de la Fiscalía y de la Unidad de Inteligencia Financiera anunciando les que se les ha abierto una carpeta de investigación.
La represión que ha caracterizado a Cabeza de Vaca se recrudece. Todos los que no piensen o actúen como el, estamos en peligro
