ARRANCAN AL 2021…
Por: Meliton García De La Rosa
Oficialmente ayer arrancó el proceso electoral estatal en el que el 6 de junio próximo renovaremos 43 alcaldías y el Congreso local, concurrente con la federal en la que elegiremos diputados federales y aunque arranca para todos los partidos, la verdad es que estos hoy en Tamaulipas viven realidades muy distintas.
Así es mis queridos boes, la pelea será entre PAN y MORENA, con el PRI en busca de dar sorpresas, Movimiento Ciudadano con el objetivo de seguir consolidándose como opción y párenle de contar.
Hoy, propios y extraños coinciden en que Acción Nacional tiene todas las posibilidades de retener el control del Congreso del Estado y mantener bajo sus siglas los municipios más grandes e importantes del territorio tamaulipeco.
Y es el PAN el rival a vencer, no solo porque está al mando estatal, sino porque es el que cuenta con la mayor estructura de organización en municipios y distritos, locales y federales. Los presidentes de los comités municipales del PAN tienen cuando menos dos años en el cargo, tiempo en el que deben haber hecho el eso que los partidos llaman estructura donde no tenían, identificado zonas de las ciudades donde tienen debilidades y trabajar sobre estas, convencer (con todo lo que eso signifique) a líderes que no han trabajado bajo sus siglas y a estas alturas deben tener identificados cuantos votos hay en cada cuadra, cada casa y cómo motivar a que vayan y voten por su partido el 6 de junio.
Obviamente a esa estructura a la que me he referido le sirve que el alcalde sea panista, que el gerente de la Comapa sea panista, que los dirigentes de los comités de salud sean panistas, que la mayoría de los funcionarios municipales y estatales sean de la misma filia política, porque en el tiempo donde no hay campaña el trabajo es la gestión.
A esa enorme ventaja que tiene el PAN como partido en el poder estatal, se suma que como amplio ganador en la elección municipal pasada, es el partido que tiene el monto económico más abultado en prerrogativas, más dinero que todos pues.
Del lado contrario, si bien MORENA tiene al Presidente de le República y el manejo de los programas sociales, con el que ayudan a viejitos, a ninis y a estudiantes, la realidad es que estos no han terminado de cuajar. Esas ayudas, que llegan directamente a los beneficiados, cuando llegan, no le ha dado suficientemente chance a los morenistas de Tamaulipas para armar un entramado de líderes de gestión, que en tiempos electorales se convierten en operadores políticos.
Pero además, los recursos para obras en los municipios que gobierna el partido del presidente no se ha notado suficientemente su mano, por el contrario los recortes a las participaciones federales han sido parejo para los ayuntamientos a los que tiro por viaje la 4T les ha dejado en el olvido.
Y lo peor, MORENA en Tamaulipas está más descabezada aún que a nivel nacional, desde el año pasado tenían a un presidente del consejo estatal interino, Jaime Oyervides Martínez, mismo que sigue ahí, como en el anonimato y no habrá tiempo de cambiarlo.
Si no hay dirigente estatal, no hay dirigentes municipales de MORENA, porque todo depende de lo que ocurra a nivel nacional, donde más de 50 buscan la presidencia. Por eso a MORENA lo que más le va a pesar en la elección que arrancó ayer es la falta de organización, de liderazgos, porque sin quien ponga orden a nivel estatal, con peso político, con apoyo desde la CDMX seguiremos viendo un pleito permanente entre los que forman las filas del movimiento que llevó a AMLO al poder.
Lo leemos de Matamoros, donde los principales críticos del alcalde Mario López son morenistas y en el resto del estado igual, hay molestia por la llegada de ex priistas y hasta ex panistas que por poder económico o relaciones de mayor nivel desplazaron a los que cuando MORENA no era nada ya apoyaban a López Obrador.
En ese partido tienen que entenderlo, a menos que AMLO logre estar en la boleta, el pronóstico será pelear por el segundo lugar con el PRI. Y ya que salió a relucir, hay que decir que el tricolor se enfrenta a la peor de sus citas con las urnas en la historia de Tamaulipas. En el 2019 quedó en tercer lugar; tendrá menos spots, obviamente tendrá mucho menos dinero que el PAN y MORENA.
A grandes rasgos es el contexto bajo el que arranca el proceso electoral, a partir de hoy se barajarán nombres y más nombres, alianzas formales y de facto, traiciones y golpes bajos. Por el PAN se da por hecho por ejemplo que Gerardo Peña va por la alcaldía de Reynosa, que Salvador Rosas por Nuevo Laredo, Carlos Fernández por Madero, Chucho Nader por Tampico, que Victoria está entre Mario Ramos, Arturo Soto o el milagro que espera Miguel Mansur y que en Altamira es Miguel ‘trampitas’ Gómez o Alfredo Polanco, por Matamoros iría Ivett Bermea o Héctor Escobar.
En MORENA primero buscan dirigentes para ver quién tiene mano para hacer la lista de candidatos y en el PRI, están batallando para ver quién quiere entrarle que quiera gastar su propio dinero.
CHUCHO, EL INFORME… Por donde le busquemos, no hay un municipio en Tamaulipas que tenga más cambios para bien, logrados desde el ámbito municipal. Tampico es la ciudad más limpia del Estado y seguro una de las más limpias del país.
Tiene los mejores mercados de todo el Estado, lo que hasta hace unos meses era un punto negro, lleno de prostitución en los alrededores de la Plaza del Mariachi, hoy es un sitio para presumir ante los visitantes.
La ciudad está iluminada, la basura pasa, hay más calles pavimentadas que nunca y la gran mayoría de los ciudadanos aprueban la gestión de su alcalde Chucho Nader, ayer rindió el segundo informe, seguro será el segundo de cinco o seis.