En los noticieros de la mañana, del mediodía, la tarde y noche, el ataque, como las críticas al Presidente López Obrador no se dan tregua, en una más que obvia orquestación mediática para disminuir social y políticamente el posicionamiento ciudadano del régimen actual, nada nuevo, si consideramos la estrategia similar emprendida por el capital y sus intereses ( neoliberalismo, le llama AMLO ) en todos los países de America Latina donde la izquierda ( o lo que queda de ella ) se posiciona en la Presidencia; Chile, con Salvador Allende, Lula en Brasil, Cristina Krischner en Argentina, Correa en Ecuador y Evo Morales en Bolivia; unos y otros han enfrentado la furia casi irracional de los grupos políticos y financieros afectados por el poder en turno, al grado que Allende fue víctima de un golpe de Estado sangriento, Lula fue a la cárcel, Cristina Krischner casi linchada en su país y Correa enfrentando hoy una persecución política que lo podría privar de su libertad, cuando sus programas de gobierno y las políticas aplicadas fueron en su momento el intento por recuperar la economía nacional a través de políticas sociales más justas y equitativas, donde los pobres y marginados representan hasta la fecha, incluyendo México, la gran deuda histórica del sistema político neoliberal. Hoy, como se sabe, los medios de comunicación y sus comunicadores, alzan la voz en protesta porque el actual régimen “atenta contra la libertad de expresión” y sin embargo ninguno de ellos deja de publicar, escribir, criticar, atacar y denostar al Presidente y su programa de gobierno de la 4T, ante lo cual se suman los llamados “intelectuales orgánicos” como Krauze y Aguilar Camín, después de ser exhibidos en sus componendas con los regímenes anteriores. Dinero del presupuesto público, concesiones millonarias, préstamos a fondo perdido, onerosas plazas en el gobierno para familiares, amigos y “amigas”, compra de publicidad, espacios mediáticos, manejo de “imagen”, entrevistas a modo… toda una chulada de componendas entre el poder y los medios de comunicación para ocultar la verdad de nuestro país y en el peor de los casos para el régimen en turno, “maquillarla” para no hacerla ver en toda su crueldad … y es así, que los Salinas, Zedillos, Fox, Calderón y Peña, transitaron sin mayores juicios mediáticos, sino que por el contrario, siempre hubo números alegres que resaltar para festejarles su administración. Sería interesante, amable lectora, lector, que uno sólo de los medios y sus comunicadores hicieran referencia de algún medio en particular que haya sido cerrado y sus editores y periodistas encarcelados como represalia a sus críticas y ataques al gobierno de la 4T y en particular al Presidente López Obrador, a quien, dicho sea de paso, no le escatiman los insultos y agresiones diariamente. La verdad no peca, pero denigra… Diría Eduardo del Río ( Rius ) y hoy los “monstruos” del periodismo nacional se encuentran rabiosos contra el Presidente que, por primera vez, los ha puesto a trabajar en serio para intentar volver por sus “moches” y demás privilegios del México de ayer … ¿ No cree usted …?.
