Un portavoz del Vaticano no hizo comentarios sobre la publicación y el secretario personal de Benedicto, el arzobispo Georg Ganswein, no respondió de inmediato
- agosto 3, 2020
- 8:28 am
- REUTERS
Foto: ReutersEl Papa emérito Benedicto XVI, el primer pontífice en 600 años en renunciar en lugar de estar en el cargo de por vida, está gravemente enfermo
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CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa emérito Benedicto XVI, el primer pontífice en 600 años en renunciar en lugar de estar en el cargo de por vida, está gravemente enfermo, informó el lunes un periódico alemán.
El Passauer Neue Presse citó al biógrafo de Benedicto, el autor alemán Peter Seewald, quien se reunió el sábado con el pontífice emérito, de 93 años, en el Vaticano.
Un portavoz del Vaticano no hizo comentarios sobre la publicación y el secretario personal de Benedicto, el arzobispo Georg Ganswein, no respondió de inmediato a un pedido de comentarios.
Seewald dijo que Benedicto XVI, quien ha estado delicado de salud desde hace algún tiempo, sufre de herpes zóster, una infección viral que causa un sarpullido doloroso, común entre las personas mayores.
El biógrafo dijo que la voz de Benedicto es apenas audible, haciéndose eco de algo que otros visitantes han dicho durante meses, y que el papa emérito le contó que podría retomar la escritura si recupera sus fuerzas.
En junio, Benedicto XVI, que vive en un antiguo convento en los jardines del Vaticano, abandonó Italia por primera vez desde su renuncia en 2013 para una emotiva visita de despedida a su hermano mayor Georg en su natal Baviera.
Georg Ratzinger murió el 1 de julio a los 96 años. Los hermanos fueron ordenados sacerdotes el mismo día, en 1951.
Benedicto XVI, quien fue elegido en 2005 para suceder al popular Juan Pablo II después de un pontificado de casi 27 años, conmocionó al mundo e incluso a sus colaboradores más cercanos el 11 de febrero de 2013, cuando anunció en latín que renunciaría.
El papa dijo en una reunión de cardenales que era demasiado viejo y frágil para dirigir una institución con más de mil 300 millones de miembros.
En el momento de la renuncia de Benedicto XVI, el Vaticano se vio envuelto en una serie de problemas financieros, escándalos de abuso sexual y luchas internas entre burócratas que dieron lugar a filtraciones de documentos importantes.
