Por Alberto Guerra Salazar
Hurgando en los archivos del periodista, canta-autor, bohemio y mejor amigo, Hugo Ramos, descubrimos un escrito suyo de fecha 7 de junio de 2018, donde revela que Maki Ortiz Domínguez habría recibido un soborno de diez millones de pesos.
Dos años después de publicado ese texto, se confirma que la entonces Senadora de la República , recibió moches, gratificaciones, untadas de mano, del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Maki incurrió en un montón de delitos: corrupción, traición a la patria, deslealtad partidista, pero no les importó porque tuvieron como consuelo o justificación, que otros muchos colegas suyos también aceptaron ser envilecidos.
En efecto, los recuentos de la prensa metropolitana indican que 95 Senadores de esa triste LXII Legislatura (2012-2018) fueron sobornados a cambio de su voto favorable a la Reforma Energética. 36 eran del PAN.
El presidente parlamentario de la comisión de energía lo era David Penchyna, del PRI, con quien se debatió en lo oscurito la iniciativa de Reforma Energética, y el que presuntamente repartió el dinero, para conseguir la mayoría de votos.
Años después, Penchyna sería nombrado director general de INFONAVIT, con un sueldo global de casi 700 mil pesos mensuales, pues se le añadían bonos y compensaciones.
En su crónica de 2018, Hugo Ramos revela que Maki usó su dinero mal habido para la compra de terrenos en Mission, Texas, donde edificó su mansión.
El tema se puso de moda con la extradición de Emilio Lozoya Austin, ex director general de PEMEX, quien entregó al gobierno mexicano información de otros actos de corrupción gubernamental, a cambio de recibir un tratamiento judicial benigno.
Lozoya entregó inclusive constancias video-grabadas de los sobornos que recibió Maki , en el año 2013.
El Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador anunció que la Fiscalía General de la República tomará el asunto en sus manos, por tratarse de un delito grave, donde está mezclado otro Senador de la época y que ahora es Gobernador, Francisco Domínguez, de Querétaro.
Se configura el presunto delito de traición a la patria, porque la Reforma Energética implicaba la privatización de los recursos naturales, preferentemente a extranjeros, pues los capitalistas aztecas no tenían tanto dinero ni tecnología moderna, para explotar el petróleo.
Afortunadamente, no hubo continuismo del PRI en Los Pinos pues resultó derrotado en las urnas José Meade y empezó en México la Cuarta Transformación, que puso freno a los remates de lotes del subsuelo.
Ni Cabeza ni Maki tienen fuero que les impida cumplir una comparecencia ante autoridades judiciales. Otra cosa será si les resultan cargos punibles, pues para ser sometidos a juicio deben desahogarse procesos institucionales para la separación de sus respectivos cargos públicos.
En un mensaje emitido ayer en la refinería de Salamanca, Guanajuato, López Obrador puso otra vez el dedo en la llaga, al mencionar la corrupción que casi acaba con PEMEX.
El robo de gasolinas se daba en las propias instalaciones de la empresa, los ductos perforados eran sólo pantalla. Reveló que descubrió un robo diario de 80 mil barriles de gasolina, que ha podido abatir hasta a 3 mil barriles.
Hubo complicidad entre delincuentes y funcionarios de PEMEX, dijo, por eso nunca se iba a acabar el saqueo.
A propósito, el Presidente reconoció que el Covid-19, el confinamiento social, la inactividad de empresas no esenciales, redujo la recaudación fiscal, y se cayeron las participaciones a los Estados, por un monto global de 18 mil millones de pesos.
Pero la jefa de gobierno del Distrito Federal, también de MORENA, avisó que existe un fondo federal por 60 mil millones de pesos, de donde se tomará lo suficiente para compensar a los Estados.
Tamaulipas ha tenido en cinco meses, una merma en participaciones de alrededor de 140 millones de pesos, pero serán repuestos más adelante.
Es previsible que las revelaciones de Lozoya Austin ante la justicia mexicana, aporten pruebas suficientes para obligar a comparecer a Enrique Peña Nieto y a su brazo financiero, Luis Videgaray.
El CEN del PAN emitió un pronunciamiento, virtual, para defender a sus 7 actuales Gobernadores que en 2013 eran Senadores, asegurando que son unas blancas palomitas, y que si existen pruebas en su contra, que las aporten y que “caiga quien caiga”.
Las filtraciones de presuntos sobornos sólo involucran a dos de esos Gobernadores, Cabeza de Vaca, y Francisco Domínguez, de Querétaro.
Por su parte, Cabeza de Vaca anunció que ya sanó y reanuda actividades oficiales. Si nadie creyó que estaba enfermo, a nadie le importó la segunda parte de su montaje. La mala noticia es que reanudó inmediatamente el turismo pues se fue a Durango, con la pandilla del GOAN, solo a grillar con pretexto del Covid-19. Eso cuesta mucho dinero.
El que parece que está enfermo pero de la cabeza, es Xicoténcatl González Uresti, pues impuso el cobro de multas con pretexto del coronavirus, sin autorización del Cabildo, y el mundo se le vino encima.
Hasta los diputados de su mismo partido, Pilar Gómez Leal y Arturo Soto Alemán, despotricaron públicamente contra el edil, y se vio obligado a dar marcha atrás, parcialmente.
Ciudad Victoria está convertido en una pesadilla, por sus pésimos servicios públicos y el mal estado de las calles, pero el gobierno panista sólo se preocupa por meter más dinero a la tesorería.
Arturo Soto Alemán no perdonó la burla, pues se lanzó contra Xicoténcatl envolviéndose en el ropaje del héroe que defiende a las clases populares. Se le olvidó que ejerció terrorismo fiscal, inventó el SAT tamaulipeco, aumentó el impuesto sobre nóminas y escarbó hasta el fondo en los bolsillos de los contribuyentes.
En tanto que en Nuevo Laredo, la más reciente sesión del Cabildo pareció una parodia de La Tremenda Corte, por los disparates proferidos. Todo empezó cuando la regidora de MORENA Adriana Contreras, propuso que el dinero que se gastaría en las fiestas patrias, se invirtiera en la compra de tanques de oxígeno.
La segundo síndico Dorina Lozano, instalada allí por las influencias del ex presidente municipal José Suárez López, saltó como resorte para oponerse con todas sus ganas, con el argumento de que se trata de una necesidad que debe ser resuelta por el señor López Obrador.
Otro regidor, del Movimiento Ciudadano, el médico Jorge Ramírez Rubio, fue más drástico en su oposición, pues acusó que el Presidente Andrés Manuel es culpable por la muerte de 30 mil personas vencidas por el Covid-19.
Este señor Ramírez Rubio es toda una ficha. Perteneció al PAN y ocupó cargos edilicios. Renunció para ser candidato del PT a presidente municipal. Luego saltó al PRD que lo hizo candidato a diputado federal. Hoy es seguidor de Gustavo Cárdenas Gutiérrez.
Juan José Zárate Quezada, otra joyita, también respingó contra la morenista. Está pintado de azul, aunque toda su vida política la hizo en el tricolor.
Enrique Rivas Cuéllar, el presidente municipal, del PAN, risa y risa.
Ayer, policías estatales asesinaron a otra persona, en Matamoros, inocente. Le asestaron un balazo cuando aseguran andar persiguiendo a sospechosos. Salía de una farmacia, con medicinas en las manos.
Y en Río Bravo, un hombre fue torturado a golpes por desconocidos y pudo llegar a su casa pero solo a morir.
Cumplen años el abogado y activista social Guillermo Gutiérrez Riestra, el periodista victorense José del Carmen Perales Rodríguez, Maricarmen Villanueva.
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