La demanda de estos insumos no ha parado y a la fecha la casa de estudios ha entregado al sector salud 160 mil tubos denominados Medios de Transporte para muestra Viral (MTV)
Los MTV son fundamentales para el traslado adecuado de las muestras de personas sospechosas de haber contraído COVID-19 a los laboratorios autorizados para realizar la prueba. Eloísa Domínguez
En los próximos días, las facultades de Medicina y Química de la UNAM elevarán a la semana de diez mil a 17 mil la fabricación de los tubos para transportar las pruebas PCR para la detección del coronavirus en la Ciudad de México.
La demanda de estos insumos no ha parado desde el pasado 24 de marzo, un día después del anuncio de la Jornada Nacional de la Sana Distancia, y a la fecha la casa de estudios ha entregado al sector salud 160 mil de estos tubos, denominados Medios de Transporte para muestra Viral (MTV)”.
En un recorrido por el Salón de Directores de la Facultad de Química, que alberga el Laboratorio 1B del Departamento de Biología, autoridades de esa escuela explicaron que el medio de transporte –tubos– producido en la Facultad de Química (FQ) cumple con las especificaciones del Indre y de la Secretaría de Salud, entidades con las que han colaborado con la creación de 160 mil MTV, para trasladar las pruebas de pacientes hacia los laboratorios donde se realizan éstas, de acuerdo con Carlos Amador Bedolla, director de la Facultad de Química.
“Los MTV son fundamentales para el traslado adecuado de las muestras provenientes de personas sospechosas de haber contraído COVID-19 a los laboratorios autorizados para realizar la prueba”, destacó en conferencia de prensa, en la que Yolanda López Vidal, del Programa de Inmunología Molecular Microbiana de la Facultad de Medicina, recordó que ante la identificación de la ausencia de este medio de transporte, desde el 24 de marzo pasado, a unos días de haber sido declarada la emergencia sanitaria en el país, se dedicaron a fabricar estos tubos, con el fin de abastecer las necesidades universitarias –primero– y, en pocos días, para colaborar con las instituciones nacionales de salud.
“Los MTV han venido a resolver la ausencia de estos reactivos en el país, que hoy se ven subsanados de manera cotidiana, a través del apoyo de las facultades de Química y Medicina, además del Instituto de Química, los cuales, organizados de manera cotidiana y sistemática, hemos dado respuesta al problema. Hasta hoy, la Facultad de Medicina ha preparado cerca de 80 mil medios de transporte”.
Cada tubo representa un gasto para las facultades de más de 45 pesos.
Carlos Amador explicó que las pruebas para detección de COVID-19 son complejas, requieren de habilidades distintas: “Nosotros colaboramos con uno de muchos insumos necesarios”.
Estos medios de transporte son una mezcla de sales inorgánicas, disueltas en agua a pH 7.0, adicionadas con proteínas, antibióticos y un antifúngico, cuya función consiste en permitir el traslado de las muestras, desde el sitio en que se realizó la recolección nasofaríngea o faríngea, hasta el laboratorio donde se ubican los equipos para realizar el análisis, manteniéndose inalterados el pH y el balance osmótico.
Se explicó que los MTV debe garantizar que las células y partículas virales, que podrían estar presentes en el hisopo con el cual se tomó la muestra, no sean dañadas, durante el tiempo de traslado a los laboratorios, es decir, que se mantengan sin cambios desde el sitio en donde fueron tomadas por el hisopo, a fin de que el resultado emitido sea confiable y se eviten falsos negativos.
