José Ángel Solorio Martínez
Ciudad Madero, Tamaulipas, es la región donde mayor potencia ha mostrado la Izquierda, en su experiencia electoral en la historia de la región. (en Río Bravo, gobernó esta expresión política sólo el primer trienio de Juan Antonio Guajardo Anzaldúa). La sociedad petrolera, se incorporó a las filas anti-neoliberales, con la ruptura del sindicato petrolero en 1988, con el régimen mexicano. La candidatura de Carlos Salinas de Gortari, decantó a los maderenses –en su mayoría vinculados a la industria de los hidrocarburos– hacia la propuesta de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
El quiñazo, del 10 de enero de 1989, fue el divorcio sin regreso de la sociedad maderense con los gobiernos neoliberales. Por una razón: dentro de sus proyectos, lo más relevante era privatizar PEMEX y como medida previa desmantelar el sindicalismo de la Quina.
En mucho, esas circunstancias, delinearon el escenario socio-político actual en la urbe petrolera.
¿Cómo está Madero hoy?
1.- Vive la hegemonía política de MORENA. Es indudablemente, el único gobierno municipal del noreste mexicano, en donde la Izquierda gobierna con eficacia. El alcalde, Adrián Oseguera Kernión, proviene del lopezobradorismo histórico. Su estrategia política-gubernamental, lo ha convertido en el cuadro izquierdista más relevante en el estado: ganó inobjetablemente la alcaldía, contra el candidato del panismo estatal; construyó una vigorosa y triunfadora estructura de MORENA, de la nada; administra la ciudad con equilibrio y tiene vínculos estrechos con la red política del Presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Al interior del morenismo, se mueven dos o tres actores políticos que desean ser candidatos. Ante la potencia de Oseguera Kernión, se ven pequeños; sin estructura, sin liderazgo y sin fuentes de financiamiento.
2.- El PAN, cuenta con dos macizos prospectos. Uno es el diputado local, Joaquín Hernández Correa; el otro, el empresario de la educación Agustín de la Huerta. La Quinita, aunque sigue teniendo cierta influencia en la sociedad de Madero, se empequeñeció al escurrirse al PAN, luego de que el PRD lo llevó a la alcaldía y luego a la candidatura al gobierno del estado, que vendió impunemente al PRI y a Tomás Yarrington.
De la Huerta, no ha podido dar el estirón en la ciudad. Los dos, centraron sus oficios en la capital del estado, apostándole más a la cercanía del gobernador que al trabajo de tierra con la ciudadanía que dicen representar.
No poseen, una estructura social vigorosa como para enfrentar la de Morena y Oseguera Kernión. El alcalde, no sólo cuenta con una retícula popular en todo el territorio; suma también, la operación de la red de programas sociales federales que si bien no operan políticamente, sí llevan consensos al lopezobradorismo local en general.
Como partido el PAN, no se ve ni se siente en la ciudad.
El primer panista del estado, ha centrado su atención en Altamira y Tampico, lo que ha dejado más vulnerables los proyectos de Agustín y de Hernández Correa.
3.- El PRI, se desarticuló en la pasada elección local. El grupo político priista que encabezó Guadalupe González se fracturó: su pupilo Erasmo González se fue a MORENA –donde logró una diputación federal, montándose en la ola de AMLO– y él, se sumó a las tareas del panismo en el sur de Tamaulipas. No se ve –a menos que quieran revivir a Genaro Hernández, otro empresario de la educación– quién pueda hacer un papel decoroso como candidato. Se infiere, que el priismo maderense –o lo que queda de él– se adherirá al PAN o a MORENA. Del tricolor, ni las cenizas quedan en lo que fue la sede del sólido sur.
4.- El escenario económico de la ciudad. Otro elemento que aporta solidez a MORENA en Madero, es la inversión millonaria del gobierno federal para revivir la refinería. Miles de empleos, centenares de contrataciones de jubilados y la inyección del dinamismo socio-económico que le caracterizó, ha generado expectativas muy amigables a la familia petrolera de la Sección Uno. No se ve ningún otro municipio de la región, que tenga ese tipo de soporte económico de la paraestatal. Sin duda: el gremio petrolero y sus familias, juegan todo su resto a la Presidencia de AMLO y a la alcaldía de Oseguera Kernión.
Ello explica –en parte– los extensos y profundos consensos de MORENA, de Oseguera Kernión y de AMLO, en el territorio que fue sede del poder petrolero más grande de Latinoamérica.
Oseguera Kernión, MORENA y AMLO, van sin competidores al frente en ciudad Madero.
