Miguel Ángel Aguilar Rodríguez.
Los mentados y muy cacareados créditos a la palabra que a través del IMSS se haría a pequeños y medianas empresas han sido solicitados por apenas un 20% de la población inmersa en este rubro, los míseros 25 mil pesos otorgados para “apoyar” a uno de los sectores de mayor productividad en el país, no fueron ni tantito la solución a un problema que indudablemente debió de atenderse desde otro enfoque financiero, en pocas palabras, se debió de inyectar un mayor porcentaje entre otras cosas.
Al evidente fracaso que representó el dichoso programa, se tienen que agregar las mentiras e innumerables obstáculos para adquirirlos tan es así que los “sabios” de las finanzas en el país, decidieron abrirlos a otros sectores, quienes también, están en la disyuntiva de gestionarlos habida cuenta de la falta de una real información.
Es este uno más de los decenas de programas que presuntamente vendrían a alivianar la carga de millones de mexicanos y mexicanos que enfrentan los durísimos embates del coronavirus y que, como se pude observar, de poco o nada han servido.
No obstante pese a que el número de contagios del virus va en franco aumento a lo largo y ancho del territorio nacional y produciéndose más contaminación en lugares que no lo estaban, el presidente de la república ANDRES MANUEL LOPE OBADOR continúa con sus “triunfantes” discursos de que el país esta enfrentando y superando con éxito la pandemia, en fin.
En medio de todo esto a juzgar por los hechos, poco a poco las estrictas medidas de seguridad implementadas por las autoridades sanitarias debido a la acelerante propagación del coronavirus se van relajando.
Es común ya observar como la movilidad va al igual en franco aumento, la apertura de algunos negocios, la relajación en las medidas sanitarias, el descontrol existente en los cruces internacionales donde a diario cruzan miles de personas a territorio nacional son apenas algunos casos que así lo demuestran.
Para variar en algunas dependencias oficiales de los tres ordenes de gobierno también ocurre lo mismo, ejemplo son las áreas de educación donde decenas de maestros provenientes de otros municipios, acuden sin el menor control a realizar diversos trámites, ciertamente que algunos son urgentes, pero no lo son más que la salud de las personas sin duda alguna ¿cómo saber si están infectados? o ¿desarrollan alguna de las etapas de contagio?.
Lo malo del asunto es que los trabajadores de las distintas áreas administrativas, no les queda más remedio que atenderlos así sea, atentando en contra de su propia salud y por ende la de su familia.
En medio de todo esto el titular de la Comisión de Educación en el Congreso del Estado diputado HECTOR ESCOBAR estima que dentro de la “nueva normalidad” la comunidad escolar tendrá que extremar en las medidas de higiene y prevención en el nuevo ciclo escolar, sin duda alguna no le falta razón pero, sería mucho mejor sí aportará algunas soluciones al respecto, porque eso de sugerir, a cualquier se da.
Podría comenzar con presionar para que las autoridades encargadas dotaran del vital liquido a decenas de escuelas que pasan semanas sin ver una sola gota, si contar que es agua la principal herramienta de higiene y prevención no tan solo contra el coronavirus sino de otra muchas enfermedades.
Por cierto quien también fuera secretario de educación en el estado ha incrementado su activismo político, principalmente a través de las redes sociales donde un día y otro opina de cualquier cosa, el tema de la semana, las energías limpias.
Desde luego que al igual que muchos que creen tener las posibilidades de poder contender en las elecciones que se avecinan, también está en su derecho de realizar cualquier práctica o ejercicio político-electoral, el punto es sin duda, no equivocarse en los tiempos.
En otras cosas no son pocos los servidores públicos que han sido exhibidos o atacados según sea el caso a través de las redes sociales, las mismas que han dado muestra de catapultar al infinito, borrar o sepultar a tal o cual personaje de cualquier ámbito y status social.
Desde del anonimato se pueden exaltar virtudes pero también enlodarlas, sobre todo cuando existe algún poderoso motivo.
Viene a colación lo anterior por lo que ocurre en con algunos funcionarios que han sido presas de la avanzada tecnología de punta, ciertamente que algunos casos son probados pero lo triste, es que en su gran mayoría son falsos, sin embargo, logran su objetivo sembrando al menos la semilla de la duda principalmente, cuando se trata de ataques personales o de familia.
Son este tipo de “estrategias” las más socorridas actualmente por mentes perversas que desde el anonimato y pagando la mayor de las veces fuertes sumas de dinero, las encargadas de ensombrecer actividades profesionales, siendo la única defensa el tiempo y la verdad, pero mientras tanto los afectados o afectadas, serán la comidilla del día.
