EL 2021 QUE PUEDE SER….
Meliton García de la Rosa.
Las dirigencias estatales de los partidos en Tamaulipas están, por decirlo suavecito en la baba, mientras están por entrar a un proceso electoral para el 2021 inédito, complejo y seguramente con reglas que todavía ni siquiera están escritas.
Así es mis queridos boes, Edgar Melhem del PRI perdido ante la imposibilidad presupuestaria y el abandono masivo que sufrió el tricolor y que no cesa desde el 2016, el René Cantú dirigente (porque líder es otra cosa) del PAN buscando promoción personal, en calidad del ‘rockstar’ que no es y sin peso entre los propios, MORENA ni siquiera tiene una dirigencia visible y los otros, los más chiquillos, andan peor.
No creo, porque no creo que les dé para tanto, que los dirigentes estatales hayan siquiera reflexionado que en 10 meses podrían estar a punto de arrancar las campañas más particulares de la historia moderna de México.
Inevitablemente los comicios se darán en el contexto de la ‘nueva normalidad’, sino es que en medio de una emergencia sanitaria. Si, me refiero al Covid-19 y sus efectos.
Y es que expertos en epidemiología, no el charlatán de Hugo López Gatell que cada semana cambia sus pronósticos, sino los de Estados Unidos y Europa, coinciden en que las medidas preventivas y el distanciamiento social desaparecerá por completo en el mundo allá por el 2022.
¿Y eso qué?, diría El Cachorro con nombramiento de dirigente del PAN, pues que las medidas preventivas y de distanciamiento social es todo lo que no se hace en una campaña y por lo tanto ya tendrían que estar planeando cómo van a afrontar las nuevas circunstancias.
¿Se imaginan a los candidatos haciendo campaña con cubrebocas o careta?, digo porque los especialistas hablan de que este accesorio llegó para quedarse por mucho, mucho tiempo.
¿Se imaginan a un candidato que no pueda saludar de mano a los que va a tratar de convencer que voten por él?, porque obviamente el saludo de mano es de las medidas más sugeridas para evitar contagios, obviamente que mucho menos habrá abrazos fingidos como se acostumbra.
¿Y qué harán los candidatos sino pueden besar niñas, niños y viejitas, si son con discapacidad mejor?, no creo que se les haya ocurrido ya qué fotos van a utilizar que supla la clásica e hipócrita gráfica en la que el candidato pega sus labios al cachete del niño o niña con secuelas de parálisis para que su imagen aparente ser la de un tipo o tipa empático con los más desvalidos.
¿Y el arranque de las campañas, ya habrán pensado qué harán, si como se prevé en la nueva normalidad los masivos serán de no más de 10 o 50 personas?, porque ahora acarrear para a cientos o miles no hay problema, ya ven que hasta estadios han llenado.
¿Y si tampoco se pueden hacer loterías, bailes y en el día D tampoco es posible que operen las casas amigas?.
Es decir, la elección del 2021 será atípica completamente, solo si tomamos en cuenta lo que nos han dicho las autoridades sanitarias, como por ejemplo que para octubre o noviembre se nos puede venir un rebrote del Covid-19 y mucho más fuerte porque se empatará con la temporada de la influenza.
Solo pensemos, si ahora tenemos ya 3 meses entre reclusión e inactividad y no hay para cuando, qué ocurriría si el nuevo golpazo de la epidemia nos enclaustra 4 o 5 meses.
No tengo la menor duda de que al momento de las estrategias electorales, quienes tomen las decisiones lo harán incluso con perfiles que prevean el contexto en el que se podría dar la elección.
Me explico: si para los meses de campaña se tiene que usar cubrebocas el candidato tiene que ser por fuerza alguien ya muy conocido, porque su rostro estará visible a la mitad a la hora que se presente con los ciudadanos
Dos, porque además sin eventos masivos, sin la posibilidad de interactuar con el beso, el abrazo, la caricia y hasta el echarse el taco de frijoles como se acostumbra en casas humildes, no habrá forma de hacer popular a figuras nuevas.
Incluso el planteamiento es hasta para los que buscan reelegirse, porque aunque a ellos no les guste que se los digan, por ejemplo los de MORENA no ganaron su elección, están ahí por el arrastre de AMLO, los diputados del PRI pues sin pluris, ni siquiera colgaron sus fotos en las calles de sus distritos y entre los panistas ocurre igual, los hizo ganar la aplanadora azul.
¿A cuántos diputados federales de MORENA conoce la gente en realidad?, ¿a qué senador de ese partido identificaría en las calles, si Américo Villarreal es como un fantasma invisible y Lupita Covarrubias bien gracias?.
Y es aquí donde no podemos dar nada por escrito, por aquello de que hoy hay quienes ven segura una candidatura por su cercanía con el mando estatal o porque al que creían más avanzado en la carrera está ‘enfriado’, porque créanme ante una elección como la que aquí esbozo es posible reconciliar hasta a los peores enemigos, será pues una elección donde se tengan que tomar decisiones pragmáticas, ya verán.