Acontecer político .
Raúl Pazos Dávila.
Hasta ayer, el coronavirus había cobrado en el país más de 5 mil vidas, según informes oficiales. La mayor parte de los fallecidos tenían problemas de diabetes e hipertensión, cuyo sistema inmunológico estaba seriamente disminuido. He allí un factor que frente a la inesperada y exponencial pandemia parece estarse ignorando, pese a ser una amenaza que desde hace tiempo se cierne sobre nosotros con funestas consecuencias, pero que lamentablemente consideramos no solo como una normalidad sino que muchas veces nos entregamos voluntariamente a ella.
Más de cien mil mexicanos mueren silenciosamente al año a causa de la “epidemia dulce”, que satura los servicios médicos oficiales y privados, acaba con la calidad de vida de quienes la padecen y para la cual, irónicamente, la vacuna está al alcance de todos pero que muy pocos se la aplican: el cuidado personal.
Se calcula que en México existen actualmente más de 10 millones de diabéticos, mientras que en 1980 se registraban alrededor de 14 mil casos. Y de acuerdo a estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, la espiral de afectaciones aumentará en los próximos años, con la obesidad y la hipertensión asociadas y, consecuentemente, el número de decesos a causa de complicaciones con otros padecimientos, como los nuevos virus que se expanden por el mundo.
Hoy nos encerramos, nos ponemos tapabocas y nos aplicamos gel para evitar el contagio por el Covid- 19 , pero tal vez seguimos abriendo las puertas a la muerte que viene disfrazada con una dulce vestimenta.
Millones de familias en el país desayunan, comen y cenan con refresco de cola. Las pizzas, las hamburguesas, la sopas “maruchans”, las “sabritas”, los “pingüinos”, y muchos otros alimentos chatarra son parte de la dieta diaria de muchos niños y adultos. Un refresco de cola, dicen, equivale a echarse de golpe 10 cucharadas de azúcar refinada. Un pollo “Kentucky” es ingerir una excepcional dosis de aceite.
Son los hábitos alimenticios de la vida moderna, de los cuales la publicidad y los intereses corporativos nos han hecho prisioneros, a costa de nuestra salud. No se trata de no consumirlos, sino hacerlo con mesura y eludir el alto consumo de grasas y azúcares. Tantos alimentos naturales que hay que podemos comer con solo un poco de trabajo doméstico.
Tal vez pronto haya una vacuna contra el coronavirus como las hubo contra el sarampión, la viruela, la poliomielitis, la tuberculosis y el paludismo.
Pero la vacuna contra el “asesino silencioso”, que puede acompañarnos para toda la vida, no se elabora en laboratorios sofisticados. Esa se elabora en casa y si no la aplicamos de manera familiar, siempre habrá un nuevo virus que nos encuentre desprotegidos y aumente el riesgo de un fatal desenlace, si no es que por sí solo nos mate simplemente porque lo ignoramos.
Pasando a temas políticos, el presidente del Instituto Electoral de Tamaulipas, JUAN JOSE RAMOS CHARRE, ya advirtió que en vista de que la emergencia sanitaria podría extenderse por varios meses más, los partidos políticos y quienes resulten sus candidatos, deberán idear nuevas estrategias de campaña, ante lo inconveniente que resultan los actos masivos y los recorridos terrestres.
El año próximo se realizarán en Tamaulipas comicios para elegir a los presidentes municipales, diputados locales y diputados federales, en un proceso empatado que se convertirá en un referente de las tendencias electorales a la mitad del sexenio de ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR.
En nuestro estado, el Partido Acción Nacional tiene el sartén por el mango, pues no solo detenta el gobierno del estado y la mayoría de las alcaldías, sino que es la fuerza dominante en el congreso local, posiciones que seguramente tratará de retener, además de recuperar los municipios de Matamoros y Ciudad Madero, donde hoy gobierna MORENA. No es improbable que consiga su objetivo.
Y es que el Movimiento de Regeneración Nacional no ha logrado consolidar una estructura sólida en la entidad y tendría que postular candidatos muy excepcionales, mientras que el Partido Revolucionario Institucional no ha podido salir del estado de agonía en que se encuentra. Del PRD, del PT y del Partido Verde, poco hay que decir.
En realidad, nadie extrañaría las campañas a nivel de suelo. A tono con los nuevos tiempos, el empleo de las redes sociales sería un recurso apropiado para establecer contacto con los electores y exponer las propuestas. Además, se ahorraría mucho dinero que podría canalizarse a programas de salud.
De plácemes se encuentran los habitantes de numerosas colonias de Altamira, tras de que el ayuntamiento que preside ALMA LAURA AMPARAN instaló en solo cuatro semanas 700 lámparas led, que no solo mejoran la luminosidad, sino que son ahorradoras de energía. De esta forma, se mejora la calidad de vida de miles de familias.
Por cierto que DOÑA LAURA recibió del empresario ALVARO GARZA CANTU y del presidente del Colegio de Notarios del sur de Tamaulipas, CARLOS PEREZ HERNANDEZ, numerosas despensas para que sean entregadas a través del DIF a familias de escasos recursos económicos. Buen detalle de ALVARO y del conocido abogado, quien es visto como prospecto a candidato a la presidencia municipal de Tampico por algún partido que aún no se ha determinado. Hay que seguirle la pista.
No hay que bajar la guardia, sigamos manteniéndonos en casa hasta donde sea posible para evitar nuevos contagios.