YA EMPIEZAN A “AFLOJAR”
Homero Hinojosa.
Este fin de semana los estados de Georgia, Carolina del Sur y Tennessee en los Estados Unidos dieron luz verde a la reapertura de diversos negocios y lugares de entretenimiento, una medida aplaudida por algunos pero calificada de alto riesgo por otros.
En una afrenta al estilo “confederado”, Brian Kemp, el gobernador de Georgia, es quien encabeza esta iniciativa de los estados sureños quienes se han enfrascado en un abierto desafío ante el Gobierno Federal.
Georgia aprobó que ciertos comercios y lugares reabran este fin de semana, entre ellos gimnasios, diversos centros de acondicionamiento físico, locales de boliche, peluquerías, salas de belleza y negocios de terapia de masajes. Los teatros y restaurantes podrán reabrir el lunes, mientras bares y clubes nocturnos permanecerán cerrados por ahora.
“De la misma manera que cerramos cuidadosamente las empresas e instamos al cese de las operaciones para mitigar la propagación del virus, hoy anunciamos planes para reabrir de manera progresiva y segura algunos sectores de nuestra economía”, dijo Kemp ante la prensa.
Para muchos, la medida rompe con la mayoría de las advertencias de muchos funcionarios de salud pública norteamericana.
Según el modelo de monitoreo del Coronavirus del Instituto de Medición y Evaluación de la Salud, Georgia llegó a su “pico” proyectado para muertes diarias el 7 de abril.
Sin embargo, ese mismo modelo anticipa que docenas de personas podrían fallecer cada día durante la última semana de abril. Y para limitar el resurgimiento del virus, el modelo recomienda que Georgia y los estados que le secundan no relajen el distanciamiento social sino hasta la segunda quincena del mes de junio, cuando se pueden considerar otras medidas para contener el virus, como el rastreo de contactos y el aislamiento.
Las medidas tomadas por los estados sureños responden a una realidad que se ha dejado notar en los últimos días: Cada comunidad, ciudad o estado parece estar tomando sus propias medidas, de acuerdo a sus experiencias y sus casos de contagio y muertes.
Acá en México, por ejemplo, diversas críticas han recibido los gobernantes de la Ciudad de México y del Estado de México por autorizar el Hoy No Circula permanentemente en la zona metropolitana de CDMX, así como ordenar el cierre de estaciones de los sistemas de transporte colectivo. Todo ello propiciando que más personas busquen las pocas alternativas de transporte y así se saturen.
En el norte del País, Tamaulipas también inició un programa de “Hoy No Circula”. Nuevo León se aprestaba para seguirle y uno de sus municipios, San Pedro, comenzó con restricciones de estilo “migratorio”, de entradas y salidas.
Cada comunidad, indudablemente, conocerá lo que mejor conviene para la salud y seguridad de sus habitantes. Sin embargo, las recomendaciones de expertos siempre deben justificar las medidas de restricción, evitando así que no se tomen estas decisiones por motivos meramente políticos y electorales.
Todos queremos dejar ya el confinamiento, pero las señales apuntan a que se debe guardar cuarentena por lo menos unas semanas más aquí en México y en Estados Unidos.