CRISTINA GÓMEZ
Hace tres semanas iban 16 casos confirmados de coronavirus en México. Ayer sumaban ya un total de 1,510 enfermos y 50 personas que lamentablemente han perdido la vida en el país debido a esta emergencia sanitaria que hasta hace poco veíamos lejana. Esta pandemia avanza en el mundo como la humedad, mientras los mexicanos nos preguntamos hasta dónde va a llegar en nuestro país, que vemos tan vulnerable en comparación con poderosas naciones cuyo sistema de salud ha colapsado de tantos enfermos de covid-19 que necesitan ayuda para sobrevivir. La estadística es escalofriante, a nivel nacional el registro de casos sospechosos hasta ayer en la noche era de 4 mil 653, en tanto que se han descartado 7 mil 822. En Tamaulipas se tienen 22 positivos, según la estadística oficial al momento de redactar este texto.
La duda es, ¿cuántos de los más de 1,500 positivos al covid-19 en México o los 4 mil 653 sospechosos son personas que en el pasado puente largo tuvieron la sangre fría de ponerse en modo turista y aglomerarse en las playas y otros sitios recreativos? En la conferencia de prensa del ya famoso doctor Hugo López-Gatell, se mostraban gráficas donde se veía que la entidad se hallaba en el lugar 23 en el número de casos y en el 28 en la tasa de incidencia con respecto al total de la población. Aunque hay que decir que las cifras de dichas gráficas no estaban actualizadas, pues hay un desfase en la numeralia de la Federación con respecto a la del estado. De la estadística nacional se desprende que los jóvenes de 30 a 34 años, de 40 a 44 y de 65 en adelante están prácticamente empatados en la distribución de casos positivos por grupo de edad. Es la población relativamente más joven, es decir, la que pertenece a los dos primeros grupos citados, la que tiene la mayor carga de la enfermedad. Las autoridades médicas lo atribuyen a que son personas con mayor dinámica social de movilización y por lo tanto, los más expuestos al contagio. Quizá muchos de ellos no pudieron quedarse en casa, tuvieron que salir a trabajar, con el riesgo sanitario que ello representa, o habría quienes no le dieron la debida importancia.
FUENTE: Milenio
