Que se califique como esencial el despedirse de un difunto.
Altamira, Tamps / Jose Juan Tomas.
Asegura sacerdote de Altamira, invita a los funcionarios a permitir que los fallecidos sean velados por espacios de dos horas con debidas medidas de salud.
El sacerdote Ángel Vargas Uribe, párroco de la iglesia Santiago Apóstol lanzó una pregunta a las autoridades de salud a fin de saber el porqué no puede velarse a los difuntos ante la pandemia del coronavirus y se puede acudir a algunos establecimiento con medidas de salud.Reveló que una de las cosas esenciales es poder despedirse del ser querido que falleció debido a que genera una situación complicada en el corazón para los familiares de quien perdió la vida.
“¿Porque si podemos estar haciendo fila en los bancos, con el metro de distancia, cubreboca, etcétera, porque no podemos hacer una fila para despedirnos del ser querido que falleció? hay unas cosas que parecen esenciales y una de ellas es darle el ultimo adiós a tu ser querido porque aunado a la muerte, o al hecho de que muere solo por la circunstancia que vivimos el hecho de no poder despedirse genera en el corazón una situación muy complicada” Ángel Vargas Uribe.
señaló que la autoridad de salud debería permitir despedirse del familiar que perdiera la vida,sin embargo recomendó que se realice un velorio breve y hacer una oración.
“Si podemos entrar a una tienda de autoservicio pero no podemos entrar a una funeraria, yo no digo que se haga un velorio de horas pero si se puede de dos horas, invito a los más cercanos, hacemos una oración y le damos una cristiana sepultura, lo encaminamos al crematorio y se acabó, ¿qué necesidad más urgente cómo el despedirse de un ser querido” Ángel Vargas Uribe, Sacerdote.
El sacerdote invitó a las autoridades a realizar una reflexión y calificó como inhumanas a las disposiciones que se han planteado
“Yo invito a las autoridades que en ocasiones no piensan en lo escénico a que hagan una reflexión con respecto a estas disposiciones inhumanas que se hacen, de que la mayoría de las personas podrá decir que como es posible, pero no se nos ha muerto alguien” Ángel Vargas Uribe, párroco