Con Café y a Media Luz | Susana Distancia entre certezas e incertidumbres.
Agustín Jiménez.
No podemos decir que están actuando de manera irresponsable. La autoridad federal está consciente de la decisión que ha tomado al recomendar, amparada en las opiniones médicas, la extensión del periodo de inmovilidad social al que se ha llamado “Jornada de sana distancia”, como estrategia fundamental para contener el avance del virus SARS – COV – 2 causante de la enfermedad denominada Covid–19.
El día de ayer en palacio nacional, el mandatario Andrés Manuel López Obrador, le cedió la palabra al subsecretario de salud Dr. Hugo López – Gatell, quien detalló la situación actual que guarda nuestro país respecto al avance de la epidemia y, con argumentos teóricos y científicos, insistió en que la fecha en que se suspenda la inmovilidad por municipios en la nación estaría condicionada a la presencia de casos del padecimiento en su respectivo territorio.
Quedando de la siguiente manera: El 17 de mayo para aquellos que no han registrado contagios y el 30 del mismo mes para las ciudades o comunidades que sí tengan individuos enfermos y para sus localidades vecinas. Aunque no se expresó de manera literal, en el mapa mostrado, aparece la zona sur de Tamaulipas en esta última condición.
Asimismo, de manera velada, el facultativo que hace las veces de vocero de la presidencia en este tema del Covid-19, reconoció que, si bien es cierto es muy temprano para declarar al país entero en fase 3, también es verdad que algunas regiones de México ya cumplen con las condiciones para ser consideradas en este estado.
Este anuncio hecho en la conferencia mañanera que acostumbra día con día el presidente López de inmediato generó una serie de preguntas sumamente interesantes entre los usuarios de las redes sociales. Algunas de ellas me he permitido tomarlas porque son indicativas de un estado de incertidumbre que se fortaleció entre algunos sectores de la población.
Dentro del mismo contexto sanitario, una de las interrogantes que más llamaron la atención fue ¿Cómo asegurar que existen municipios de México que no tienen presencia del Covid-19 si, según la misma opinión de los expertos, el modelo de vigilancia centinela, arroja una cifra que no es detectada por unidades hospitalarias, pero sí están ciertos de que existe y, por tanto, hay cerca de 30 mil enfermos en nuestra nación?
¿No es un tanto contradictorio que, aunque asegurando que “no se puede negar lo que no se ve”, ahora se obvie ese sustento y se anuncie una parcial reactivación de la movilidad, circunscrita por cordones sanitarios que delimiten a las zonas infectadas?
Seguramente para el día en que usted esté leyendo la presente entrega en EL SOL DE TAMPICO, ya se habrá dado a conocer la lista de municipios – incluidos los de Tamaulipas – que deberán sujetarse a la normatividad social.
En el rubro educativo, las fechas para volver a clase serán tentativamente, según sea el caso, el 18 de mayo o el 1 de junio. El mandatario indicó que el próximo martes se contará con la presencia del secretario de Educación, Esteban Moctezuma Barragán, para contestar las dudas que puedan tener padres de familia, maestros y alumnos sobre las medidas que se llevarán a cabo para salvar el ciclo escolar.
Mientras tanto ya hay profesores que preguntan ¿Qué medidas se tomarán para evaluar de manera objetiva el aprovechamiento del alumno?, en el caso de aquellos que dieron clase vía digital y cumplieron con el contenido del programa académico ¿Deberán repetir las clases de forma presencial o cuál será la nueva dinámica si se obliga al joven a volver a la escuela?, ¿Cómo garantizar la tranquilidad de los padres que enviarán a sus hijos al centro escolar en el que convivirán con más de cien personas en un espacio relativamente confinado? Entre otras más.
Quien ve un panorama oscuro ante esta decisión es, sin duda, el sector comercial pues al continuar la inmovilidad social también seguirá detenido el circulante y se mantendrán los bajos – o nulos – índices de ventas de sus productos y servicios. Los comercios que no ofrecen productos o que tienen actividades consideradas como no esenciales, seguirán cerrados y, por tanto, los empresarios deberán implementar estrategias para garantizar los salarios de sus empleados, aunque no estén generando ganancias, aunque, en honor a la verdad, muchos de ellos ya no saben qué hacer.
Cabe hacer mención que, en días pasados, en una de las conferencias vespertinas, se habló de una posible clausura a aquellos establecimientos que hagan caso omiso a estas indicaciones, además de que deberán continuar cerrados los centros de esparcimiento, si esto fuera cierto, la medida terminaría por ahogar la actividad empresarial de algunas regiones de México en las que, como la nuestra, un ingreso sustancial depende enteramente del turismo que nos visita.
Debemos señalar que AMLO, sin decir nombres, aprovechó para dirigirse a “aquellos gobernadores que han pedido créditos millonarios” y les sostuvo que “en lugar de generar más deuda, hagan un esfuerzo de austeridad republicana”, lo anterior, indiscutiblemente, incluye al ejecutivo de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, así como a sus homólogos que forman el bloque “Gobernadores en Acción”. Seguramente en las próximas horas, veremos y escucharemos la respuesta del mandatario estatal.
Lo dicho por el presidente López Obrador, está sostenido por el argumento de que “no se les ha dejado de mandar las participaciones federales a los estados”, recordemos que, desde el inicio de este sexenio, el gobierno tamaulipeco, hizo público que a la entidad no se le está devolviendo la parte proporcional adecuada de lo que previamente envía a la federación, razón por la cual, muchos proyectos aquí se detuvieron.
Este último punto de incertidumbre pudiera reforzar la idea del rompimiento del pacto fiscal que tanto se ha venido hablando en las últimas semanas.
A partir de este día, estamos seguros, veremos un número creciente de manifestaciones sociales de diversos tipos por la decisión tomada, algunas fundamentadas en la razón; otras, en la angustia; unas más, en la desesperación y las últimas con base en la rivalidad política. Sin embargo, estamos seguros de que todas, en medio de la ambigüedad y la incertidumbre, a su modo, estarán asistiendo al sagrado derecho de preservar la vida humana.
Y hasta aquí pues como decía cierto periodista: “El tiempo apremia y el espacio se agota”.