Altamira, Tamps / José Flores.
El ingenio Mexicano no tiene límites y más si se trata de salir de problemas económicos que afecten a la familia. Algo así está sucediendo en el Municipio de Altamira, tras el cierre de negocios de diversos giros por parte de la Coepris, hace casi dos semanas atrás.
La venta de ropa, zapatos y comida ya es cosa del pasado, ahora la gente se está dedicando a vender no solo cubre bocas de distintos tipos y gel antibacterial así como lentes o gogles, si no también tapas de huevo al mayoreo, leche y papel de baño.
Al recorrer la zona centro de la ciudad se puede ver cómo la gente se las ha ingeniado para mantener abiertos sus locales, en los cuales se tuvo que hacer un cambio drástico a las ventas.
