Disminuyen hasta un 50% usuarios de transporte público en Victoria
Llegada del Coronavirus ha significado la gota que derramó el vaso en un mes que ya era malo
CD. VICTORIA, TAM.- El movimiento del pasaje en el transporte público de la ciudad ha decaído hasta en un 50 por ciento producto de la contingencia de salud que impera en el país según fue advertido por el líder de la Asociación de Transportistas de la línea de los microbuses de los rojos Pedro García Silva.
Ante la ausencia de personas en las calles muchos sectores comerciales y de servicios prevén afectaciones en sus ventas y el transporte público no es la excepción; chóferes de distintas rutas y taxis de la ciudad observan la caída en la demanda del servicio.
«Disminuyo mucho, porque no hay escuelas y también por el problema del coronavirus, entonces tenemos que enfrentar también esta fuerte crisis, disminuyo hasta en un 50%».
García Silva señalo que la llegada del Coronavirus al estado ha significado la gota que derramó el vaso en un mes que ha sido muy malo para los transportistas, pues con el paro universitario, de primarias, secundarias y ahora hasta de adultos mayores están afectados en sus ingresos diarios.
Desde el primer día del mes hasta este día en el que platicamos, ha visto cómo los espacios vacíos dentro de su unidad son más visibles que los pasajeros a bordo.
“Nosotros de por sí ya sabíamos que en estas fechas de proximidad de semana santa esto bajaba, porque cuando no hay escuela todo se calma, pero con esto del Coronavirus vino a bajar más“ lamentó.
Indicó que los choferes reportan a los concesionarios que la actividad es casi nula ”Nos dicen que están cansados con notoria decepción en su voz de pasar afuera de universidades, secundarias, primarias, parques y plazas y solo ver lugares vacíos al fondo del vehículo”.
Señaló que al día cada unidad sube un aforo de entre 150 y 200 pasajeros, cantidad de boletaje que resulta insuficiente para cubrir el gasto del combustible y salario del chófer con la escasez de pasajeros por el coronavirus.
Fuente: La Capital