Carece de atención médica, está recluido en un cuarto lleno de triques, no hay quien vigile su aislamiento y de medicamentos sólo tiene paracetamol
Por MARTHA MARTINEZ
Sólo, con un cuadro recurrente de fiebre, tos seca y sin poder respirar bien,así se encuentra Baltazar Salinas del Ángel, el segundo caso sospechoso en Nuevo Laredo de Covid-19.
Baltazar ha hecho por sí mismo la labor de medicarse y hasta de buscar alertar a las personas con quien tuvo contacto, para que éstas verifiquen su situación de salud, pues es chofer del grupo Senda y en su último viaje, el autobús que manejaba trasladó a 36 pasajeros de Ciudad Valles a esta ciudad fronteriza.
“Estoy solo en un cuarto de la empresa, sin clima, lleno de triques, con mucha tos seca y fiebre, que me quito con puro baño. Yo solo me atiendo, me nebulizo y tomo pura paracetamol… es lo que me dieron”, comentó Salinas.
Nadie parece preocuparse y de no ser por su aislamiento podría andar en las calles.
Baltazar, de 31 años, es originario de Tampico Alto de Llano, un municipio del puerto de Veracruz, pegado a la costa, muy cerca de Tampico Tamaulipas.
Es chofer de autobuses para pasajeros, que llegó a Nuevo Laredo procedente de Ciudad Valles, San Luis Potosí, pasando por Ciudad Mante, Ciudad Victoria, Monterrey hasta llegar a esta ciudad, donde comenzó a sentirse mal.
“Fui el martes al Seguro, donde me trataron como un bicho raro y en la empresa me negaron el servicio para trasladarme. Yo llegué solo y me fui solo”, contó.
El martes 24 de marzo le hicieron los exámenes a las 12:00 del mediodía, los resultados estarían dentro de 48 a 72 horas, el plazo se cumple hasta el sábado.
Baltazar está preocupado, aseguró que la empresa quiere trasladarlo a su ciudad de origen, pero él no quiere irse hasta conocer el resultado, además de que se siente totalmente discriminado.
Fuente: El Mañana de Laredo
