Un leve descuido al manejar, causó que perdiera el control y saliera del área de rodado, cayendo a un precipicio y resultando ¡sin un rasguño!
Vaya susto que se llevó un joven conductor que al tripular un automóvil a exceso de velocidad sobre una peligrosa y solitaria carretera, repentinamente perdió el control del volante y acabó cayendo a un profundo barranco; sorprendentemente el individuo resultó ileso.
Este hecho ocurrió sobre la carretera antigua Victoria-Tula en el kilómetro 174, en donde testigos, impresionados por lo sucedido, decidieron llamar al número de emergencias 911.
En cuestión de minutos, elementos de la Policía Estatal, acudieron, logrando localizar la unidad accidentada.
Así mismo, al inspeccionar el vehículo, se percataron de que una persona se encontraba en el interior sin conocimiento, por fortuna, momentos después volvió en sí, facilitando el rescate.
Además, los paramédicos de la Cruz Roja se encargaron de prestar los primeros auxilios al joven de aproximadamente 19 años.
Los elementos de auxilio informaron que, pese a lo fuerte del accidente, las lesiones presentadas no ponían en riesgo su vida, atendiéndolo en el lugar, sin ocupar algún traslado.
Según los uniformados, al tomar declaración del conductor, explicaron que el conductor viajaba de Ciudad Victoria al Municipio de Jaumave.
Se desplazaba a bordo de un automóvil Honda tipo Civic con placas de Texas, cuando repentinamente perdió de vista el camino, provocando dirigir el trayecto a la derecha, precipitándose a un barranco de aproximadamente 10 metros de profundidad.
Trasciende que gracias a los árboles de dicho terreno, poco a poco disminuyó la velocidad en la que cayó el automóvil, deteniéndose entre la maleza y severamente dañado.
Finalmente, el sujeto abandonó la unidad y decidió retirarse caminando, argumentando que no se dirigía a pie hacia su domicilio, ya que no contaba con el dinero para pedir una grúa.
Fuente: Vox Populi Noticias
