Política

MATAMOROS SIGUE CALLADO

OPTIMUS

Por: Jorge A. Pérez González www.optimusinformativo.com

Sábado 10 de octubre 2020

La sociedad de matamoros permanece pasiva ante los acontecimientos recientes, de ser la ciudad más tranquila del Estado de Tamaulipas, comparándola obviamente con las de su similar tamaño, hoy se convierte en ring de batalla de escenarios a futuro.

Esto que no pasa desapercibido por los usuarios de redes sociales, parece que no tiene eco en las asociaciones civiles que regularmente han estado atentas a los acontecimientos que ponen el riesgo la paz social del municipio.

Cuando apenas se vislumbra la luz al final del túnel llamado COVID19, con la apertura de las restricciones impuestas por la Pandemia, aparece en el cielo un nubarrón de inseguridad que ya se había superado.

Los líderes de las organizaciones empresariales no expresan su opinión, permanecen en silencio obligados tal vez por cuestiones ideológicas absurdas, pues independientemente del color del gobierno en turno, aquí es donde viven, aquí es donde ejercen y aquí es donde jugarán sus hijos y nietos.

Tal vez están más entretenidos con el tema nacional, donde a diario les pintan mediante sus redes sociales, un panorama comunista, socialista y retrograda, que pondrá en riesgo sus fuentes de empleo y la posibilidad de vivir en libertad en un futuro no muy lejano.

La empresa socialmente responsable, es la que está atenta al entorno, la que ve por el crecimiento intelectual de sus empleados, la que sin

actitudes paternalistas, enfoca en la responsabilidad el crecimiento individual.

Amigos de COPARMEX, CANACINTRA, CANACO, CONSEJO EMPRESARIAL, UNION DE COMERCIANTES, ASOCIACIONES DE MAQUILADORAS, algo está pasando en su pueblo y ustedes no han dicho nada, no es necesario recordarles que el último renglón de su estado de resultados depende primordialmente de la tranquilidad con la que vivan sus empleados.

Sé que muchos dirán en sus grupos de WhatsApp que la situación se está convirtiendo en insostenible, pero hace falta más que eso, pues esta ciudad fronteriza es brava y ellos lo saben bien.

Basta leer las crónicas urbanas de FaceBook, para conocer a detalle que ahora los Agentes de Tránsito están peor que antes, hay quien relata que fue detenido sin razón 3 veces el mismo día, violando el artículo 11 constitucional, la explicación policiaca fue que era una operación de rutina. Esto no lo escribió un “Bot” o una cuenta no identificada.

Recibo diariamente quejas en vías directas sobre los abusos policiacos en los retenes ilegales de las carreteras, las historias son muchas y siempre terminan con la dádiva pecuniaria para evitar problemas posteriores.

Antier por la tarde fue muy aparatoso el operativo con un helicóptero del gobierno de Tamaulipas del grupo especial GOPES, durante horas nos preguntábamos todos que estaba sucediendo en Matamoros, no hay fuentes oficiales que den a conocer las situaciones de riesgo en la ciudad, vamos ni siquiera el Consulado de Matamoros que regularmente está atento emitió un tuit.

Ya por la noche, periodistas independientes, de ORA Noticias que arriesgan su vida, nos informaban vía redes sociales, cómo varios jovencitos trabajadores de un taller de lavado de autos habían sido secuestrados por policías dentro de su fuente de empleo, los familiares vecinos del lugar denunciaron públicamente que fueron agredidos y despojados de sus teléfonos celulares, televisiones y otros

artículos al efectuar un cateo en casa de cada uno de los detenidos ilegalmente.

Mientras ellas, las mujeres denunciaban, el grupo especial policiaco mantenía con amenazas vía altavoz a los familiares de los detenidos para que no se acercaran.

En dicha trasmisión se denuncian también las amenazas a los reporteros que acudieron a dar cobertura a los hechos. Durante la trasmisión en vivo, los policías especiales con lámparas tácticas impedían la cobertura a distancia de los periodistas.

El mayor reclamo fue el del abuso policiaco, pues en sus operativos especiales despojan de bienes a las víctimas, mientras MATAMOROS SIGUE CALLADO.

Jorge Alberto Pérez González

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