MORENA, SIN EL PRESIDENTE
FRANCISCO CUÉLLAR CARDONA
“El único hombre con el que habla sobre temas políticos, es Ricardo Monreal, y no es fortuito, ni circunstancial que un monrealista como Alejandro Rojas, sea el que esté consultando a mano alzada si la militancia se queda o se va con el López Obrador, si este dejara Morena”
Aunque el Presidente López Obrador no ha desaprobado la decisión del Congreso de Morena
en el que fue aclamado Alfonso Ramírez Cuéllar como dirigente formal de este partido, existe un evidente enojo de su parte por como se siguen comportando las tribus morenistas. La semana pasada comenzó a circular un rumor fuerte en el que se asegura que las horas del Presidente están contadas en Morena.
«Andrés Manuel está decidido a dejar el partido», empiezan a decir los morenistas en Palacio Nacional. El presidente no necesita a Morena, ni a la banda de gavilleros que hoy «se matan» por tomar el control del partido, afirman.
La misma semana pasada en su gira por Tierra Caliente, Guerrero, el aspirante a la dirigencia nacional, Alejandro Rojas-Díaz Durán, empezó a preguntar a las bases, si el Presidente López Obrador se iba de Morena, estaban dispuestos a irse con él, y la respuesta fue a un grito generalizado: Síííí.
El mismo Presidente está haciendo sondeos para conocer cual es el sentimiento de las bases morenistas sobre los pleitos en la cúpulas. El único hombre con el que habla sobre temas políticos, es Ricardo Monreal, y no es fortuito, ni circunstancial que un monrealista como Alejandro Rojas, sea el que esté consultando a mano alzada si la militancia se queda o se va con el López Obrador, si este dejara Morena.
El Presidente sabe que con o sin Morena, su arriago y su popularidad está intacta, y más cuando ya tiene la certidumbre que estará en la boleta electoral donde se consultará la revocación de mandato. La autosuficiencia y la seguridad que siente, lo hace creer que no necesita guajes para nadar, y menos a un partido tan conflictivo como Morena.
En La Mañanera le preguntaron su opinión sobre la llegada de Ramírez Cuéllar a Morena, y aunque le simpatiza, solo se concretó a repetir lo que ya había dicho: «yo no me voy a meter en temas del partido, que ellos resuelven. Les reitero que no soy jefe del partido; eso se acabó; aquí no se vale eso».
A AMLO no le interesa Morena y está decidido a irse, y más porque le hicieron llegar información de primera mano en la que la aseguran que las posturas y posiciones entre los grupos se van a radicalizar. Ya le informaron que Claudia Sheinbaum, Mario Delgado hicieron alianza con Bertha Luján y Gabriel García. Y de Yeidckol Polevnsky le filtraron información que hasta los Salinas, están tratando de meter mano en el partido.
Estos motivos y más, le bastan al Presidente para poner tierra de por medio y alejarse del partido que lo llevó al poder. En el 2021, dicen, Morena puede quedarse sin AMLO, pero seguiría recargándose en su figura, así como el Partido Encuentro Solidario (PES), Redes Sociales Progresistas (RSP), MASXMEX y otros partidos que están en formación lo seguirían en el 2021. Por eso, estratégicamente al Presidente le conviene desde ahora desmarcarse de Morena y de los demás partidos para llegar a las elecciones intermedias sin cargas partidistas negativas.
Cuando el río suena, es por que agua lleva, dice el refrán, y el rumor de que el Presidente se va…está por concretarse, aseguran.
Fuente: Expreso.press