Además de la falta de medicinas y personal, el nosocomio en el Mante está comenzando a mostrar deficiencias en su infraestructura.
Por: Israel Reséndiz.
Durante poco más de una década en la que ha servido para la comunidad el hospital general del Mante, ha mostrado poco trabajo en mantenimiento en de su infraestructura, lo que se ha seguido acentuando a lo largo de los años, al grado que hoy en día es mayormente notoria la deficiencia que presenta para la comunidad, independientemente de los faltantes de hasta lo básico para atender a personas lesionadas o por cirugías que tienen que permanecer por algunos días para su recuperación.
La falta del mantenimiento se ha dejado ver en las instalaciones de las lámparas que se ubican por el lado de la calle donde está la puerta principal, las cuales llevan años que no encienden, pero pareciera no importar por que el alumbrado de la vía publica complementa la visibilidad para esta parte del nosocomio.
Sin embargo, desde hace unos días a la fecha, el funcionamiento de la puerta principal, es lo que ha mostrado que no hay interés ni de las autoridades de salud ni de las que administran los hospitales para aplicarles el mantenimiento necesario, pues la puerta corrediza que funciona con un mecanismo automatizado para abrir y cerrar al detectar alguna persona aproximándose, ahora ha dejado de hacer esa función y quienes pretenden entrar tienen que abrirla manualmente.
De esta forma tanto las personas que se encuentran en la parte posterior y tienen que entrar desde buscando atención en los consultorios hasta los servicios sanitarios, tienen que abrir la puerta de esa forma, incluyendo al personal médico, enfermeras y el resto de los oficiadas que se desempeñan en cualquiera de las áreas cercanas, lo que independientemente de la incomodidad para algunos y la falta de atención para otros, detalles como este siguen mostrado que poco a poco pudieran ser otros de los enceres necesarios los que fallen y se dejen de la misma forma.
La decadencia por este tipo de facilidades para la comunidad en general, pudiera además retrasar el tiempo de atención en alguna persona que por razones de la emergencia llegue en vehículo particular a atenderse y pretenda acusar por ahí por ser más rápido según de donde llegue, a pesar de que hay un área para la atención de las urgencias, pues en una emergencia la comunidad actúa generalmente por lo que está más a su alcance.
En el año 2015 la administración estatal de ese entonces destino una cantidad importante para el mantenimiento e infraestructura de los hospitales de Tamaulipas, dentro de la cual no fue contemplado el de ciudad Mante, por considerar que en ese tiempo de acuerdo a los reportes actuales no necesitaba nada y estaba en buen estado todo lo necesario.
Fuente: el Tiempo Press
