HÉCTOR GARCÉS
Con una carta fechada el 18 de febrero, pero que no tenía firma y en cuya zigzagueante redacción nunca manejó la palabra renuncia, Mónica García Velázquez se hizo a un lado de la presidencia del PRI en Nuevo Laredo.
Por supuesto, tampoco estampó los motivos reales de su decisión: ella quería quedarse al frente del comité local priista. Eso quedó claro desde el momento en que lo pidió a la nueva dirigencia estatal encabezada por Edgar Melhem.
La respuesta que recibió de la directiva tricolor tamaulipeca fue que buscara el consenso con los sectores, organizaciones y liderazgos del tricolor en esa fronteriza ciudad. Sin embargo, lo único que obtuvo fue el rechazo.
El tema se puso tan candente con Mónica García, actual regidora en el Cabildo y ex diputada federal en la 57 Legislatura, que el experimentado Enrique Cárdenas del Avellano tuvo que viajar a Nuevo Laredo para dialogar con los diversos grupos tricolores. De paso, tomó protesta a la Comisión de Procesos Internos, presidida por Alfonso Tejada Lara.
En ese evento fue significativa la ausencia de Mónica García Velázquez, pero también cobró especial relevancia la asistencia de Yahleel Abdala Carmona, diputada local y ex lideresa estatal del Revolucionario Institucional. Es evidente que las dos damas pintaron su raya. El resultado, al momento, es favorable para Yahleel.
La inconformidad de los grupos priistas de Nuevo Laredo no sólo es con la regidora, sino también con su marido, Ramiro Ramos, ya que la pareja todo lo quiere negociar como si fueran estructuras distintas y con amplia influencia, cosa más que alejada de la realidad.
El consenso de los grupos que se oponen a la dupla Mónica-Ramiro fue que Jesús Valdez Zermeño, ex gerente general de la Comapa y regidor en funciones, se registre hoy como candidato de unidad a la presidencia del comité del PRI en Nuevo Laredo. La realidad: tampoco había mucho de dónde echar mano para la dirigencia local.
La tensión priista todavía se mantiene en Altamira -donde los grupos abrieron fuego durante la semana pasada- con el registro de los aspirantes a la presidencia del comité local que se realizará hoy, entre las 10 y las 12 horas, ante la Comisión de Procesos Internos que preside Griselda Sosa.
Dos aspirantes a la dirigencia tricolor altamirense confirmaron a EL KIOSKO su puntual registro:
– Antonio Olvera Márquez, impulsado por los ex diputados locales Griselda Carrillo Reyes y Carlos González Toral, y respaldado por el MT, ONMPRI y Red de Jóvenes, así como por ex coordinadores de área, llegará a las 9 de la mañana a la plaza principal de Altamira, de donde partirá, una hora después, hacia las oficinas de partido para inscribirse en la competencia. Afirman que habrá verbena popular.
– Edgar Vargas Licona, ‘El sobrino de El Chilero’, se registrará alrededor de las 11 horas. Ahí presentará las firmas y apoyos de la CTM, la CNC, ONMPRI, Sindicato de Petroquímicos, Sindicato Nacional de Irrigación y de la Unidad Revolucionaria. También cuenta con la ayuda de lideresas de colonias, es decir, de liderazgos de la estructura territorial.
¿Y Jaime Martínez García? EL KIOSKO conversó ayer al mediodía con el profesor. Textual, expresó: ‘Todavía no he tomado una decisión’. Cuando se le preguntó sobre el examen del pasado viernes, el ex secretario del Ayuntamiento confirmó que lo presentó. No obstante, comentó: ‘Eso no quiere decir que me vaya a registrar’.
Jaime Martínez añadió que seguía platicando con los amigos que lo impulsan y que horas más tarde tomaría la decisión. ‘Estoy buscando el consenso’, dijo. Se desconoce si decidió registrarse o abstenerse de participar.
Todo indica que cetemistas y cenecistas, principales grupos que rechazan la llegada de Toño Márquez (su primer apellido es Olvera, pero los altamirenses lo conocen más por su apellido materno), se la jugarán con el proyecto de Edgar Vargas Licona y, por tanto, Jaime Martínez no se registraría, a fin de evitar que se divida el voto del frente opositor.
Sobre el tema de Antonio Olvera Márquez, ‘El sobrino de El Chilero’ insistió contundente: ‘Estamos en lo dicho, no queremos una imposición’.
También se quejó de que había sufrido retraso con la entrega de ciertos documentos que debe entregar para su registro, como es el caso de la constancia del examen que presentó el viernes pasado en Ciudad Victoria. Hasta anoche no se lo habían enviado a su correo electrónico. No obstante, confiaba en la imparcialidad del Instituto de Formación Política y de la Comisión de Procesos Internos.
Si validan los dos registros -esperemos que así sea-, la competencia se va a poner intensa en busca de la presidencia del PRI de Altamira. ¿Quién ganará? ¿Toño Márquez o Edgar Vargas?
Una pregunta más: ¿Se inscribirá Jaime Martínez o dará su apoyo al sobrino de ‘El Chilero’? La batalla por la dirigencia tricolor altamirense se puso candente.
PRIISMO JAIBO CON ROBERTO BRONDO
A las 10:30 horas de hoy, Roberto Moreno Brondo y Ana Laura de la Fuente Díaz llegarán a las oficinas del PRI de Tampico para registrase como candidatos a la presidencia y a la secretaría general del comité tricolor jaibo.
Ellos integran la fórmula de unidad pactada por los principales liderazgos que quedan en el Revolucionario Institucional de Tampico, entre ellos, Paloma Guillén, Gustavo Torres Salinas, Sergio Villarreal Brictson, Pepe Rábago y Pancho Bolado.
Aunque los despistados de siempre insisten en que Magda Peraza metió mano, esto es falso, una mentira absoluta. A la profesora no la quieren ver ni en pintura en el tricolor. Ella, en realidad, quisiera tener el cariño de Morena, pero todo ha quedado en simples coqueteos. Pero esa es otra historia.
Y PARA CERRAR…
Quien se quedará a cargo del PRI en Altamira tras la renuncia de Manolo Castillo a la presidencia del comité, es Norma Briones, actual secretaria general.
Ella es una lideresa ligada al grupo de Carlos ‘El Cacho’ Toral.
