Por: José Juan Tomas.// Tampico.
Finaliza el año 2019 y los asesinos de Nataly Martínez Rivera y Mario olivo siguen sin recibir sentencia, ya que pesar de existir un nuevo sistema de justicia en México en el estado de Tamaulipas, los procesos son demasiado lentos por lo que familiares de las víctimas temen que puedan salir en libertad y ambos homicidios queden impunes ya que hasta el momento los asesino se encuentran recluidos en el penal de Altamira, pero sin recibir sentencia por el juez de control.
Por lo tanto Familiares de las víctimas esperan que el próximo año 2020 sea más ágil tanto para el Poder Judicial como para la Fiscalía General de Justicia y se obtengan resultaddos favorables, los culpables sean sentenciados.
Al joven Mario Olivo le dieron un golpe en la cabeza con un objeto pesado que lo mató prácticamente al instante, así que los responsables de su asesinato al ver lo que habían hecho, decidieron desmembrarlo y enterrarlo en diversos puntos de la zona.
Las indagaciones refieren que, a base de engaños, Karen llevó a Mario a dicho domicilio de la urbe petrolera y, posteriormente, el actual novio de la muchacha lo golpeó en la cabeza al encontrarlos en “una situación poco comprometedora”.
Lo que prosigue después incluye a César Adrián, amigo de Gilberto, ya que después de hablarle procedieron a destazar el cuerpo ya sin vida en la vivienda de Madero.
Nataly Martínez Rivera era mamá de tres hijos, tenía 28 años y vivía en la colonia Del Pueblo de Tampico, el 2 de agosto murió a manos de su hermana Marina y supuestamente una segunda, las cuales tenían fama de ser “locas y agresivas”.
Nataly era la menor de cuatro hermanas, la describieron como una chica noble, linda y positiva, por lo que hasta el día de hoy nadie da crédito del ataque que sufrió.
Según declaraciones de sus propios familiares, las hermanas de Nataly siempre la presionaron y maltrataron, según refieren los vecinos, ella siempre les tuvo miedo.
