LOS MUERTOS QUE NADIE QUIERE CARGAR
FRANCISCO CUÉLLAR CARDONA
Cuando el presidente de la República sale y dice con «sus datos» que en México, la violencia va a la baja, asegurando que el número de homicidios ha disminuido, y horas después aparece el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) afirmando que no es así, que el 2019 se colocó como el año más violento de toda la historia después de la Revolución Mexicana con 330 mil 944 víctimas, mientras que en 2018 fueron 304 mil 030, una diferencia de 26 mil 914 casos.
¿A quién creerle?.
El gobierno, sea del partido que sea, siempre va a tratar de ocultar la verdad y la realidad de los hechos. Está claro que en este tema de la violencia y la inseguridad, nadie quiere cargar la cruz de los miles de muertos, pero ya es tiempo de saber quién miente y conocer la verdad al desnudo.
Ayer un jefe militar en Nuevo León admitía que la Guardia Nacional está apanicada y paralizada ante el acoso y ataque de las diferentes bandas del crimen que están decididos a matar y matarse en aras de su supervivencia.
Lo peor de todo, agregó el militar, es que los altos mandos castrenses están atados de manos porque no pueden moverse ni sugerir nada al jefe supremo porque está aferrado a su estrategia de no responder a la provocación de las bandas. El enojo de los jefes militares es real y algunos ya están pensando en renunciar o promover su retiro anticipado.
«Mientras los delincuentes están matando y operando a sus anchas, la Guardia Nacional y los soldados están momificados, sin moverse», dijo.
En ese contexto, los números de los muertos en esta guerra, siguen creciendo. En tanto, las autoridadesestán maquillando cifras y ocultando información de una realidad que tiene aterrorizada a toda una sociedad que está viendo caer a sus víctimas inocentes.
Los números son de escándalo y nadie quiere asumir culpas. Todos responsabilizan al pasado y se hacen los occisos ante tanta violencia. Es tiempo de que la sociedad empiece a levantar la voz y exija cuentas a los responsables de todas las instancias de gobierno. No se puede seguir jugando con la inteligencia de la gente o tratarlos como unos tontos.
Talachazos
CON LOS NIÑOS NO.-Cuando empezaron a circular las imágenes en la prensa digital y en las redes sociales, la expresión general fue de enojo y repulsión. Los niños cargando con dificultad sus fusiles y tapando sus rostros con pañuelos: eran los menores de edad en la zona de Chilapa en el Estado de Guerrero, que han sido habilitados como «policías comunitarios» para enfrentar al crimen organizado que en aquella región tiene aterrorizada a la población.
En otras entidades donde el crimen ha sentado sus reales, estas imágenes son muy comunes, pues hay niños que no llegan a los 15 años y ya cargan, no fusiles rudimentarios como los de Guerrero, sino cuernos de chivos, granadas y hasta lanzamisiles. Esta realidad es de escalofrío. Es la descomposición social que estamos viviendo.
Esto no puede seguir, tampoco el gobierno puede ser insensible y ver esto como una consecuencia de esta guerra. ¡Con los niños No!, exclamó la primera dama de la Cuarta Transformación hace un año. Hoy, esa debe ser la consigna: CON LOS NIÑOS ¡NO!.
Fuente: Expreso.press