Desde el Río Bravo hasta el Río Pánuco, de Nuevo Laredo a Tampico, después de tres estrepitosas y dolorosas derrotas electorales (2016, 2018 y 2019), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) quedó prácticamente destruido, desmantelado en Tamaulipas.
A poco más de un mes de asumir la dirigencia estatal, Edgar Melhem y Mayra Ojeda recorren el estado para dialogar con los pocos militantes que se mantienen fieles a portar con cierto orgullo la camiseta tricolor.
La realidad es abrumadora: el nuevo presidente y la nueva secretaria general del PRI estatal caminan entre los escombros de lo que alguna vez fue una estructura poderosa, una potente maquinaria cuyas amplias ramificaciones llegaban hasta el último rincón de la entidad.
Acostumbrado a depender del gobierno del estado que lo cobijó durante más de ochenta años, el PRI tamaulipeco entró en una aguda y severa crisis política al perder la gubernatura en el histórico proceso electoral de 2016.
A cuatro años de aquella derrota, el priismo estatal todavía atraviesa por una dura y complicada etapa: aprender a ser un partido político de oposición.
En ese aprendizaje se encuentra el Revolucionario Institucional que preside Edgar Melhem. Su proyecto, estructurado en varias etapas, busca la reconstrucción, desde los cimientos, del partido.
La reconstrucción partidista, por supuesto, pasa por los comités priistas de la zona sur, en particular Tampico y Ciudad Madero.
Pese a las adversidades, el priismo de Altamira, a diferencia de sus vecinos, registra mayor activismo con un comité local que se mantiene abierto y con una representación en el Cabildo (seis regidores) que, en términos generales, sostiene una agenda de gestión.
La problemática más profunda se encuentra en Tampico: muchos liderazgos prefirieron marcharse a otras opciones políticas (Olga Sosa Ruiz, por ejemplo) y otros optaron por retirarse (Pancho Bolado). Unos más están a la expectativa, sin tomar una decisión final (Sergio Villarreal Brictson).
Gustavo Torres y Pepe Rábago asumirán, en buena medida, los trabajos de reconstrucción del PRI en tierras jaibas. Por supuesto, recibirán críticas, pero alguien tiene que hacer el trabajo, tomar pico y pala, cargar los sacos de cemento, hacer ‘la mezcla’ y sentar las bases de la obra.
En Ciudad Madero, tres nombres podrían ser claves en las tareas de reconstrucción del Revolucionario Institucional: Oscar Genaro Hernández Zúñiga, Marco Antonio Guzmán Medina y Gustavo González Balderas.
Candidato a diputado local a finales de los noventas, posición que no alcanzó tras caer en las urnas, Oscar Genaro Hernández tiene deseos de regresar al activismo político desde hace tiempo. El empresario puede imprimirle una nueva imagen al maltrecho PRI maderense.
Con un perfil de mayor seriedad, Marco Antonio Guzmán Medina, mejor conocido como ‘Macoy’, es otro priista que trae ganas de regresar a la actividad política. Integrante del grupo que dejó Guadalupe González Galván, ‘Macoy’, quien fuera regidor en el trienio de ‘El Capi’ Juan Hernández Correa, también podría darle un giro interesante y favorable al priismo de la urbe petrolera.
Por su parte, el probable regreso de Gustavo González Balderas al activismo político es muy significativo. En la elección de 2000, cuando el PRI perdió por primera vez la presidencia de la república, ganó de manera cardíaca la diputación federal del Séptimo Distrito.
Después, Gustavo González Balderas se convirtió en un especialista de la operación electoral y, por tanto, era un enviado recurrente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI a las elecciones locales o estatales. Por ejemplo, en una ocasión le tocó ir a la Puebla de Rafael Moreno Valle, donde las cosas se pusieron ‘calientes’.
Como jubilado petrolero, tendría tiempo para dedicarse de lleno a la chamba de reconstrucción del priismo en la zona sur. ¿Podría ser el delegado del comité estatal en el Distrito Siete, que abarca los municipios de Madero y Altamira? Es una posibilidad.
El estilo concertador de Edgar Melhem contribuye a que ciertos liderazgos se muestren interesados en volver al partido tricolor. Veremos hasta donde llega la primera convocatoria trazada por el nuevo dirigente en su plan de reconstruir el priismo estatal.
PRIMERA REUNIÓN SINDICAL ESTATAL EN 2020
La Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio de los Municipios del Estado de Tamaulipas (FSTSMET) realizará hoy, después del mediodía, su primera reunión de trabajo del año.
Matamoros será la sede del encuentro en la que, como se acostumbra de manera puntual, se analizará la situación de los agremiados.
Azael Portillo Alejo, secretario general adjunto del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Honorable Ayuntamiento (SUTSHA) de Ciudad Madero, asistirá a la reunión de trabajo, que se llevará a cabo en el salón del restaurante ‘Los Portales’, en tierra matamorense.
Y PARA CERRAR…
Con la sobresaliente calificación que le concedió la evaluación de Consulta Mitofsky y que lo ubicó en el tercer lugar entre los mejores alcaldes del país, Chucho Nader se encontraba contento y satisfecho.
El dato de alta aprobación ciudadana fue para el presidente municipal de Tampico una inyección de energía para acelerar el paso en 2020 en todos los ámbitos.
Fuente: Expreso.press
