Para los amigos, (Eugenio y Carlos) justicia y gracia; para los enemigos, (Cabeza de Vaca) la ley a secas
Por: Vicente Hernández
“Si la justicia existe, tiene que ser para todos; nadie puede quedar excluido, de lo contrario ya no sería justicia.” «Paul Auster»
Hace días, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) dio a conocer que el exgobernador del estado Francisco García Cabeza de Vaca es inelegible como candidato a diputado federal, por la vía plurinominal en Tamaulipas, (y a cualquier cargo de elección popular) ya que los magistrados desecharon un recurso promovido por los abogados del exgobernador, en contra del acuerdo del INE, que declaró improcedente el registro del político.
Previo a esta resolución, el pasado 17 de abril le fue invalidada la candidatura a Cabeza de vaca por ser considerado “Prófugo de la justicia”, razón por la cual fue interpuesto el mencionado recurso por los abogados de Cabeza de Vaca, pero ante el reciente fallo negativo para Cabeza de Vaca, se da por concluido legalmente este caso, y los actores políticos oficialistas, celebraron que en este país la justicia fue aplicada cabalmente sobre un presunto delincuente, por los delitos de delincuencia organizada, y operaciones con recursos de procedencia ilícita, y por lo tanto una persona con “órdenes de aprehensión” no puede aspirar a un cargo de elección popular. Así sea.
La frase que encabeza este texto, que se le ha atribuido a Benito Juárez, y que tal parece que Andrés Manuel López Obrador, quien admira a raudales a al Benemérito de las Américas, la aplica, al igual que sus partidarios morenos, como todo… a su manera, como la canción de Paul Anka, porque si bien no es santo de mi devoción, Cabeza de Vaca, creo que a todos los candidatos que se encuentren en una situación similar al del Cabezón, tendrían que ser medidos con el mismo rasero, o sea, siguiendo los mismos criterios, sin hacer diferencias entre ellos.
En el caso de Carlos Peña Ortiz (a) “El Rey de los Amparos” alcalde con licencia de Reynosa, la misma Sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que veto a Cabeza de Vaca, determino que Carlos Peña tiene goce de sus derechos político-electorales, así como su reincorporación al Padrón Electoral, y la expedición de su credencial para votar, hasta en tanto se resuelva el fondo de su proceso judicial, o séase, Carlitos no es culpable hasta que no se demuestre que, si lo es, pese a tener orden de aprehensión, y bajo este tenor Carlitos anda alegremente haciendo campaña para su reelección bajo las siglas de Morena, no obstante estar acusado por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, emitida desde el 2021 por el abogado Marcelo Olan Mendoza, bajo la carpeta de investigación CP/00 17/2021, curiosamente el presunto delito por el cual es acusado Carlos y su señor padre, Carlos Peña Garza, es similar a uno de los dos delitos por los que está acusado Francisco García.
También llama la atención, que a finales de septiembre de 2023, sale libre Eugenio Hernández Flores después de permanecer casi 6 años prisionero en diferentes penales, acusado por las autoridades estadunidenses de establecer, junto con su cuñado, una serie de empresas ficticias donde desfalcaron al estado de Tamaulipas, por medio de contratos públicos, y que abrió varias cuentas en Estados Unidos, donde depositó un total de 300 millones de dólares, equivalente a lavado de dinero y fraude bancario, y por tener vínculos con el crimen organizado, peculado y operaciones con recursos de procedencia ilícita, y la coincidencia se repite “operaciones con recursos de procedencia ilícita”.
Pero a tan solo cuatro meses y medio de obtener su libertad, los buscadores de talentos del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) una vez que se enteraron que don Eugenio era una pillo de siete suelas, más rápido que aprisa lo invitaron, y el acepto, a ser su candidato oficial a la Cámara de Senadores en la próxima elección del dos de junio, pero en los primeros días del pasado mes marzo, el representante del PAN ante el Consejo General del INE Víctor Hugo Sondon Saavedra, impugno su candidatura, aduciendo que existe una orden de extradición hacia los Estados Unidos, (por la cual Eugenio está amparado), siendo la impugnación RPAN-0255/2024 con la cual se pretendía echar abajo el registro del ex presidiario.
Y nuevamente, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, fallo a favor del ex gobernador Hernández Flores, con el argumento de que “no se encuentra privado de libertad por un delito que merezca pena corporal, como lo establece la jurisprudencia” así que su candidatura fue dada como válida, y “apegada a la ley”, y que no tenían fundamentos para restringir sus derechos político-electorales.
Así, que sin que nadie se lo impida, este prófugo de las rejas anda en plena y casi agónica campaña, y por mera ¿casualidad? su compañera de formula es Maky Ortiz Domínguez, madre del otro “inmaculado” candidato morenista Carlos Peña Ortiz, para quien junto a don Eugenio Hernández, si se les aplico la justicia y gracia, mientras que para el impresentable Cabeza de Vaca, le toco la ley a secas.
