Los más de dos mil migrantes que están en las orillas de río Bravo o en los dos puentes internacionales más importantes de Matamoros, corren serios peligros de enfermedades como tifoidea, cólera y hepatitis. Esto la gran contaminación que se ha generado en los alrededores, sin sistema de drenaje, sin agua limpia para asearse ni comer bien.
El doctor Monserrato García Viveros, coordinador de Salud Preventiva, acepta que no hay condiciones para que ellos vivan ahí bajo los árboles o casas de campaña. Lo que importa es la higiene y eliminación adecuada de desechos humanos, algo que llevan meses sin hacer y tardo o temprano va tener repercusiones.
Peligro
Enfermedades como el cólera son transmitidas por uso o consumo de agua socia que trae microbios dañinos, el no lavar bien los alimentos antes de cocinar también puede repercutir en enfermedades graves como hepatitis, lo peor es que va a desencadenar muchos contagios.
Sin contar otras infecciones propias del invierno que de esperan en los siguientes dos meses, “no se quieren ni dejar vacunar y esa es la preocupación. Cuando vengan a reaccionar ya va a ser demasiado tarde y no queremos que eso pase”, expresa.
Contaminación
Tanto es su tiempo libre que tienen en ese lugar que han creado de todo un poco, hasta construyeron fogones artesanales, pusieron bateas para lavar sobre la calle Tamaulipas y se bañan en el río. Desechan agua sucia en plena calle y hasta desechos humanos que finalmente se les regresarán a través de la respiración.
