MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
Los policías muertos en este primer año del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, superan a los del último año de Enrique Peña Nieto y por mucho, pero por mucho superan los del primer año de Felipe Calderón Hinojosa”
Los últimos cinco policías asesinados en México, si es que anoche no mataron más, fueron los del Municipio de Frontera en Coahuila, donde un comando los atacó mientras realizaban un patrullaje en plena Navidad, en lo que va del año ya son por lo menos 438.
Así es mis queridos boes, para ser un año en el que se supone no hay guerra contra las bandas de crimínales, es una cifra que supera incluso a algunos de los años de cuando se dio el manotazo al panal y se alborotó el avispero.
Los policías muertos en este primer año del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, superan a los del último año de Enrique Peña Nieto y por mucho, pero por mucho superan los del primer año de Felipe Calderón Hinojosa.
El año pasado, el último de EPN fueron asesinados en el país 421 policías, mientras que el primer año de Calderón Hinojosa fueron 180.
Es decir: con guerra 180 policías muertos; sin guerra ya van 438, más los que lastimosamente pudieran sumarse en seis días que le restan al 2019.
Es el de los policías, de cualquier nivel, un gremio al que los gobiernos y la propia sociedad civil le ha negado el crédito suficiente en la lucha contra la criminalidad.
De los policías se ve, casi siempre, el lado negativo, se generaliza sobre los actos de corrupción que algunos agentes cometen, se da por hecho que las corporaciones están infiltradas y que todo está podrido dentro, pero de sus muertos muy poco se dice, de sus actos heroicos casi nada se publica.
Fue en el sexenio de Vicente Fox, donde los policías tuvieron sus mejores años, al menos en el número de asesinados, porque la numeralia que dejó el de Ernesto Zedillo ya marcaba índices muy parecidos a los peores de la guerra contra el narco.
Y es que en 1997, cuando gobernaba Zedillo hubo 360 policías muertos, en 1998 fueron 290, la cifra se mantuvo en ese sexenio.
Cuando llegó Fox en el 2000, llos policías muertos fueron 200 y en el 2001 se mantuvo esa tendencia, pero a partir de ahí los policías caídos disminuyeron: 2002 con 180,para el 2004 fueron solo 150 y ese número sólo varió por unos cuantos hasta el 2005.
Vino Calderón Hinojosa y con el también panista la declaración de guerra a las bandas, comenzó la carnicería, le llovían críticas, entre ellas las de López Obrador, cuyos números en materia de seguridad superan por negativos a los de su peor enemigo político.
El primer año del panista; el 2006 los policías muertos fueron 180, a pesar de las balaceras, los topones, los operativos. Para el 2007 fueron asesinados 220, para el 2008 subió a 240 y el 2009 se elevó a 300.
Creíamos que México estaba en su peor espiral de inseguridad, porque en el 2010 los policías muertos en combate o en ataques directos ya eran 430 y en el 2011 ya encarrilados fueron 517, el punto máximo en ese sexenio.
Ya en el 2012 que gobernó casi todo Calderón la incidencia bajó a 386, número que marcó el arribo de Peña Nieto al relevo.
Los primeros años de EPN fueron de disminución en el número de policías caídos, 2013 solo 297, el 2014 los muertos fueron 232, la tendencia se mantuvo en 2015 con 265 y en el 2016 mucho mejor con apenas 200.
Pero se vino el 2017 y la escalada de policías muertos se duplicó y más, con 561, el más mortífero para los uniformados con Peña Nieto, muchos más incluso que el peor año de Felipe Calderón.
El priista cerró el año y su sexenio con 421 policías muertos en el 2018, se fue entre críticas y con niveles de aprobación por los suelos, ante un presidente entrante (López Obrador) con un apoyo ciudadano sin precedentes para un inicio de sexenio.
Pero como ya señalaba desde arriba, este 2019, el primero de AMLO, el primero luego de dos sexenios en guerra, con un final del enfrentamiento declarado y una estrategia de abrazos no balazos, los policías siguen poniendo una cuota muy alta en el número de víctimas.
Hasta ayer iban 438 y la cuenta puede incrementarse.
Lo más lamentable, reitero, es que los policías están bajo dos fuegos, el de los malos que los mata y el de la opinión ciudadana que los condena injustamente, dos flancos que los victimizan más la indolencia de un gobierno federal que sin estrategia los deja a merced de la delincuencia organizada.
Por cierto los que más casos han registrado son: Guanajuato, Michoacán, Guerrero y Chihuahua, en ese tema Tamaulipas de Francisco Javier García Cabeza de Vaca también ha salido del top, este año van aquí 7
La lista negra la encabeza Guanajuato con 68, Michoacán con 40, Chihuahua 32, Jalisco 29, Guerrero 25, Edomex 23 igual que Sonora. Parecen solo números, pero tras ellos hay cientos de huérfanos, viudas y madres llorando. Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong
Fuente: Expreso.press
