MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
México cierra el 2019 como el peor año en materia de violencia, nunca desde que se mide la ola delictiva, allá por 1997, había habido tantos muertos como ahora que gobierna Andrés Manuel López Obrador, para el que la culpa es de los gobernadores que no asisten a las sesiones de seguridad que realizan sus delegados casi de madrugada; aunque los otros datos como siempre lo desmienten.
Así es mis queridos boes, muy temprano AMLO y Alfonso Durazo soltaron ponzoña contra los gobernadores priistas, panistas y perredistas, a los que llamaron ausentes de las reuniones, dando a entender que era ahí donde la criminalidad estaba a la alza.
“El propósito no es culpar a nadie sino informar y que los ciudadanos tengan todos los elementos, no ocultar nada, no maquillar cifras, decir la verdad”, dijo
“Pidiéndole a las autoridades locales que se apliquen también, muchos lo hacen, otros delegan, eso no recomendable, ese es el problema que más le preocupa a la gente y por eso debe tener toda la atención y hay veces que no se atiende de manera directa”.
Obviamente AMLO y Durazo resaltaron que la gobernadora de la CDMX Claudia Sheimbaum era la que más asistencia tenía a las reuniones madrugadoras y en la lista de los bien portados también están los morenistas de Tabasco y Veracruz, además de Nuevo León del independiente Bronco.
Y claro que los de la 4T no se aventaron contra los panistas y priistas, que según ellos desprecian las reuniones, entre ellos mencionaron a los azules de Tamaulipas, Guanajuato, Aguascalientes, al del PRD de Michoacán.
Pero resulta que la asistencia de los gobernadores a las reuniones de madrugada no tiene relación directa con los resultados de la lucha contra las bandas de la delincuencia organizada, como puede desatarse en el caso de Tamaulipas, que encabeza Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Porque de acuerdo a los números de AMLO y Durazo, que aunque los tienen no los leen, en este año en Tamaulipas bajó más del 22 por ciento el número de homicidios violentos. De hecho en esos datos de la 4T resulta que Tamaulipas está en los mejores diez estados en el tema de mejora de la seguridad.
Si la lógica de dividir al país de AMLO y Durazo fuera la correcta respecto a la asistencia de gobernadores a la reunión, en la CDMX estuviera chillando la víbora de la inseguridad, donde los homicidios lejos de disminuir han aumentado.
Pero no vayamos hasta la CDMX, aquí al lado, en Veracruz del morenista Cuitláhuac García, la inseguridad también está desbordada.
Es decir que el que los gobernadores vayan y se sienten de madrugada a las sesiones de la mesa de seguridad no va a resolver el problema, no es que si dicen presente los malos vayan a dejar de operar ese día, de lo que se trata pues es de hacer la chamba, incluso la que ha dejado de hacer el gobierno federal, ese que está más ocupado en culpar al pasado y a los gobernadores que en cumplir con su responsabilidad de combatir a las bandas cuyos delitos son del fuero federal.
“Jamás en la historia de Tamaulipas se habían aplicado tantos recursos en materia de Seguridad Pública. Simplemente este próximo año, el Gobierno de Tamaulipas estará haciendo un esfuerzo para aplicar cerca de 5 mil millones de pesos, con los que se estarán instalando más de 4 mil videocámaras en diferentes puntos del estado y construyendo un C5 con toda la tecnología que les permita a ustedes (los policías) desempeñar mejor su trabajo”, dijo hace dos semanas el gobernador Cabeza de Vaca.
Ayer además ya estaban funcionando dos de las estaciones seguras de las que se instalarán cada 50 kilómetros en las carreteras estatales y que contarán 24 horas con policías, monitoreo y espacios para la atención de los ciudadanos.
Es decir; está comprobado, con la reducción de más del 22 por ciento de homicidios este año en Tamaulipas, que ir a la reunión de madrugada y tomarse una foto y escuchar y decir buenas intenciones no se va a reducir la inseguridad; eso solo se logra con acciones, con estrategia, con inversión.
Por eso es que la entidad ha dejado de estar en el top de los delitos de alto impacto, reduciendo los de secuestro, la extorsión y lo que ya señalaba el homicidio.
Aquí lo había dicho la semana pasada, mientras la Federación manda a decenas de elementos de la Guardia Nacional a Tamaulipas sin patrullas y por ejemplo en la zona conurbada de Tampico, Madero y Altamira el alcalde Jesús Nader les da raid en un bus escolar, el gobernador entregó al mismo tiempo decenas de patrullas para los elementos estatales.
Repito, no es con discursos, no es con asistencia a las reuniones, no es culpando a los otros como se combate a la inseguridad; Tamaulipas es la prueba de ello.
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Fuente: Expreso.press
