MARCELA GÓMEZ ZALCE
Demasiados lugares comunes contribuyeron a desarrollar y legitimar el paradigma que alimentó la guerra contra las drogas. Si bien el rol de Estados Unidos fue decisivo en el proceso de imposición de esa “guerra” en México, la dinámica alcanzada tiene una responsabilidad compartida; la presión de Washington como condición sine qua non para exentar al país de los requerimientos de certificación en los que se evaluaban los esfuerzos mexicanos en el combate al tráfico de estupefacientes. En 2002 el Congreso estadunidense aprobó la ley pública 107-228 que eliminaba la exigencia anual de la certificación a raíz del viaje presidencial de Fox en 2001, donde urgió a los legisladores a tener un gesto de fe en su nuevo gobierno afirmando que “cuando hay confianza, un socio no juzga unilateralmente a otro”. México abrazó el nuevo paradigma durante tres sexenios haciendo implosión con la captura, extradición y juicio contra Joaquín Guzmán Loera. En poco más de un año en una Corte de Nueva York se abrió la caja de Pandora con la red de vínculos que el cártel de Sinaloa tejió con presuntos sobornos a Genaro García Luna, hoy preso en Estados Unidos. La historia oficial del fracaso del éxito exhibido por años, daños colaterales, violaciones a los derechos humanos, miles de muertos y riquezas explicables en esferas políticas, militares y empresariales apenas comienza. Llama la atención que las complicidades no alcancen a las agencias estadunidenses encargadas de asistir al gobierno mexicano en esa lucha contra el narcotráfico. Ante el escándalo el presidente López Obrador instruyó una investigación sobre el actuar de funcionarios ligados al ex secretario García Luna. En esta generalización presidencial hay ángulos que trastocan el aparato de inteligencia y de seguridad nacional del Estado y de poderosos grupos empresariales hoy muy cercanos a la 4T. La hebra de allá será investigada aquí con la lupa del enriquecimiento ilícito. El resultado será de pronóstico reservado ya que García Luna terminará declarando y develando la red de corrupción oficial y las complicidades dentro del Estado mexicano. La 4T debe estar preparada para las secuelas de este peligroso escenario.
@GomezZalce
