Bebé tirada en el Río Bravo en NLD estaba viva
La madre tuvo un parto prematuro espontáneo de una bebé de 34 semanas, pero al hacerle la autopsia se reveló que sí había respirado. Ahora enfrentará cargos de homicidio y abandono
Nuevo Laredo, Tamaulipas.─ La bebé de 34 semanas que fue arrojada por su madre a orillas del río Bravo en la colonia Roma de Nuevo Laredo, sí respiró antes de morir.
Lo anterior fue confirmado a través de la autopsia que se le realizó al cuerpo de la niña en la funeraria local, a donde fue enviado luego de las actuaciones de campo realizadas por autoridades ministeriales.
Por lo tanto, Jessica “N”, de 23 años, quien convalece en un hospital de esta frontera, deberá ser puesta a disposición de un juzgado para enfrentar cargos de homicidio y abandono de persona, revelaron autoridades ministeriales.
El jueves por la noche, Jessica “N” sufrió un parto prematuro y no un aborto espontáneo como ella mencionó mientras estaba en su casa.
No avisó a sus familiares como cualquier persona. Al contrario, envolvió a su pequeña hija de 34 semanas y la dejó abandonada cerca del río Bravo, en los alrededores de su vivienda.
El caso se descubrió gracias a un reporte que hizo el personal de guardia del Hospital Civil, al que acudió la joven mujer al no detenerle la hemorragia producto del parto prematuro que tuvo.
En el nosocomio, Jessica “N” fue entrevistada por policías investigadores, quienes lograron descubrir que dejó a su hija cerca del río, en los alrededores de su hogar.
Hasta el lugar acudió personal de la Policía Estatal investigadora así como de Servicios Periciales, y encontraron a la niña; después realizaron el trabajo de campo y gestionaron el traslado del cuerpo a la funeraria para la práctica de la autopsia.
Se logró conocer que la bebé tenía aproximadamente 34 semanas y dentro de sus pulmones se encontró oxígeno, lo que confirma que la menor respiró antes de morir, y esto no le importó a la mujer y la dejó abandonada.
Fuente: Hoy Tamaulipas