Por: Eleazar Avila
Cuando muchos mexicanos piensan que los Estados Unidos nos van a invadir, les tengo buenas y malas noticias; la ocupación norteamericana con nuestra amada y frágil República tiene casi 200 años.
Esa es la buena, según se quiera ver, la segunda que es realmente interesante y mala según sea el caso, es que son posiblemente millones los mexicanos que piensan que no sería tan malo, si los vecinos nos sacan de la penuria en que vivimos desde la existencia de nuestra nación.
Empecemos por decir que, desde que el navegante Cristóbal Colón, en representación de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, llegaron de chiripa desde Europa a América en 1492; luego 1493, 1498 y 1502, la penuria no ha cesado.
Cierto, las condiciones varían y los avances tecnológicos nos hacen la vida más llevadera, pero eso no significa que seamos un país soberano en términos absolutos, pues nos guste o no, la globalización llegó para quedarse, es más, ahora mismo las naciones empresa son una realidad.
Usamos calzones fabricados en Guatemala, celulares en China, Estados Unidos y Corea, toallas de quien sabe dónde, banderas y lucecitas navideñas que son fabricadas en masa en todas partes.
La música del Himno Nacional compuesta por Jaime Nunó Roca, Catalán, tiene derechos de autor y pertenecen al estadounidense Henneman Harry, porque los descendientes del compositor español, vendieron los derechos de su obra. Entonces de qué rayos estamos hablando.
Es más, si revisamos la historia nos encontraremos con intervenciones armadas de Estados Unidos a México en diferentes etapas y donde destaca el conflicto bélico que enfrentó a México con los Estados Unidos entre los años 1846 y 1848, donde perdimos la mitad del territorio.
Nos podemos saltar de fecha en fecha y pensemos en la intervención que tuvo Estados Unidos para derrocar a un “iluso” Francisco I Madero. El más grande “tierno” todos los mandatarios mexicanos, en un movimiento conocido como La Decena Trágica, del 9 al 18 de febrero de 1913.
Un golpe militar liderado por Victoriano Huerta, pero dicen algunas versiones comandado por el embajador estadounidense Henry Lane Wilson. La efemérides de los desencuentros son montones, pero sin duda ignorar que existe una presencia supra consultar de Estados Unidos en México sería de bobos.
De este tamaño ha sido la circunstancia nacional con nuestros vecinos, quienes con un presidente tan fuerte como Donald Trump advirtió que tiene en camino declarar terroristas a los distintos carteles. Una decisión que si nos ponemos en el filtro legal americano, les da facultades para intervenir, incluso militar, para proteger sus intereses.
Así las cosas desde el 17 de octubre con el caso Sinaloa o el crimen de los binacionales Lebarón en Sonora-Chihuahua. Estos últimos, promotores de una idea que fue secundada por el gobernador de Tamaulipas Francisco García Cabeza de Vaca, rechazada por la Federación, pero reposicionada por el Gobierno de los Estados Unidos.
Les dejo un dato: La Ley Patriota fue promulgada en octubre de 2001, tras los atentados del once de septiembre tiene el objetivo de ampliar la capacidad de control del Estado en aras de combatir el terrorismo. Se promulgaron nuevos delitos y se endurecieron las penas por terrorismo.
Así mis queridos amigos, paisanos, connacionales, amigos, familiares, cuates, son estos tiempos de prevalecer despiertos. Nadie puede estar por ahora distraído. Como siempre lo digo con respeto, sé que lo que sobra, son motivos para estar dispersos, pero esta vez hágase un favor, pilas.
Hasta ahora las posiciones son claras: Donald Trump en entrevista declaró a pregunta expresa: «Serán designados (…) He estado trabajando en eso durante los últimos 90 días. Saben, la designación no es tan fácil, se tiene que pasar por un proceso y estamos bien metidos en ese proceso».
La respuesta de México, si bien es contundente, no estamos ciertos de la fuerza que pueda tener nuestro gobierno para enfrentar una eventual contingencia. Para Marcelo Ebrard nuestro secretario de Relaciones Exteriores.
“El tema de narcoterrorismo tiene un impacto jurídico internacional, porque hay una legislación estadunidense que posibilita cuando se declara, se determina a un grupo terrorista. Entonces, se invocan esas disposiciones para actuar de manera directa. Eso, por supuesto, México jamás lo aceptaría”.
Vaya nudo en que estamos nuevamente. Acaso debemos pensar que por segunda ocasión en el sexenio, más valdrá un buen arreglo que un mal pleito, pues con qué canicas nos hacemos los fuertes.
La primera acción perdida fue la del muro humano que con la Guardia Nacional se realizó para contener las multitudinarias caravanas de migrantes que partían desde América Central.
OTROSI: Y sin duda quien si supo leer, nos indican amigos de Washington, por sus buenos contactos en el Departamento de Estado y la Casa Blanca fue el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca quien se anticipó a la decisión norteamericana de designar como terroristas a los cárteles de México.
Dieciocho pendientes…
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