El Presidente reconoció haber pasado momentos dolororos durante su primer año de gestión; reconoce como asignatura pendiente la inseguridad
CIUDAD DE MÉXICO
El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que en su primer año de gobierno ha tenido cinco momentos dolorosos, entre ellos el enfrentamiento en Culiacán, Sinaloa, el asesinato de la familia LeBarón, en los límites de Chihuahua y Sonora, y el asilo político a Evo Morales.
Durante su conferencia de prensa, López Obrador aseguró que uno de los sucesos que más lo afectó en lo personal, fue la explosión en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tlahuelilpan, Hidalgo, donde 137 personas perdieron la vida.
Luego podríamos decir que tuvimos lo de los aranceles, esa crisis de poner aranceles a las mercancías mexicanas. Afortunadamente salimos bien y se alejó esas amenazas y eso ayudó a la estabilidad economía”, afirmó el mandatario federal.
Indicó que también fue un episodio complicado la “guerra que se desató en Sinaloa”, la cual calificó como «la guerra más breve de la historia», ya que duró cuatro horas. “Fue complicado porque tomamos decisiones en circunstancias difíciles, pero consideramos que se actuó bien».
El cuarto momento doloroso que aseguró ha tenido su gobierno fue el ataque contra la familia LeBarón en el municipio de Bavispe, Sonora, donde murieron tres mujeres y seis menores de edad.
Esta lamentable tragedia de la familia LeBarón, la pérdida de la vida. Estamos actuando para esclarecer los hechos para que haya justicia estamos trabajando”, refirió.
López Obrador aseguró que la decisión de otorgar asilo político a Evo Morales, expresidente de Bolivia, fue otro momento que aunque fue difícil, «se tomó la decisión correcta».
López Obrador indicó qué hay asignaturas pendientes en su mandato como es el problema de la inseguridad, pues “se dejó crecer mucho el problema, fue un error, más que un error, fue un crimen el haber declarado la guerra al narcotráfico”.
Fuente: Excelsior
