Diabetes e Hipertensión continúan acabando con Mantenses
por: Israel Reséndiz.
Los casos de personas con problemas de diabetes e hipertensión que siguen surgiendo cada vez más en personas desde los treinta años, es un problema que comienza a complicarse, en el sentido de la atención que han solicitado las personas víctimas de estos padecimientos en unidades médicas de salud pública y particulares, así como altruistas.
El problema que inicia con los hábitos alimenticios de niños desde el nivel primaria, ha generado mayores índices en jóvenes que desde los treinta años, debido a la vida rutinaria que llevan día con día con motivo de laborar, no tienen más remedio que comer lo que este a su alcance aprovechando el tiempo suficiente de descanso para continuar con sus actividades cotidianas.
Lo anterior se ha vuelto una de las causas por las cuales desde hace varios años la incidencia de casos promedio este disminuyendo, pues hasta hace diez años el mínimo era a los cuarenta años con principios de cualquiera de los dos padecimientos.
En muchos casos los padres de familia son consentidores con sus niños, y al permitirles ingerir lo que les gusta, están provocando un habito que en unos años se les convierte en dependencia, por lo cual es muy difícil que asimilen la alimentación con nutrientes y productos que no cuenten con grasas y azucares en exceso.
Al convertirse en adolescentes resulta que ya fueron desarrolladas personas que dependen de una cierta cantidad de porción de comida chatarra, por la comodidad en la alimentación, a lo cual se le suma el tabaquismo y el grado de alcohol que les da por ingerir desde los veinte años en promedio, de cuerdo a las cifras de la Secretaria de Salud.
Es a los treinta años cuando comienzan con padecimientos que pudieron prevenir con una dieta consistente en menos sustancias dañinas y el habito de hacer ejercicio diariamente, por lo cual ahora las unidades de salud pública desde los centros comunitarios hasta clínicas dependientes del IMSS y el ISSSTE, se siguen viendo en la demanda por medicamentos para el control de la diabetes y la hipertensión.
Los casos se extienden hacia los dispensarios médicos en los cuales, quienes no cuentan con recursos económicos para adquirir algún producto para ambas enfermedades, tienen la necesidad de acercarse a estas unidades para solicitar cualquier producto que pueda servir de manera gratuita, lo que afortunadamente de momento hay en existencia debido a la donación de otras personas que consideran que de momento no lo van a ocupar.
Fuente: El Tiempo Press