LA HORA DE TODOS / Víctor Contreras
Llegó al cargo como una burla a la gente pensante, a los verdaderos historiadores, a los que si documentan la historia, a los académicos.
Ser la Comadre del Rector Jesús Lavín, su único capital académico.
Y pese a reprobar la materia de Metodología de la Investigación y que algunos funcionarios uateños gestionaron su aprobación y los catedráticos de la UNAM en negarse, y por tanto, no solo reprobó sino que la expulsaron de la Maestría en Historia (2002-2004), y aún así la nombraron titular del Instituto de Investigaciones Históricas de la UAT.
Apoyada en el control acosador y hostigador del personal académico y administrativo por Rita Manzur, una mujer que solo tiene estudios de secundaria, tal parece la directora del Instituto de Investigaciones Históricas de la UAT, Laura Hernández Montemayor no tiene ninguna intención de dejar el cargo, luego de tener el privilegio de cobrar 15 años como “aviadora” y 16 como titular.
Ha sido un cruel suplicio para los investigadores serios, que se gastaron las pestañas en aprobar maestrías y doctorados, tener como directora a “La Comadre del Rector”, que no tiene más producción histórica que la compilación de datos sobre la vida de “Guadalupe Mainero”, del que se dice, es tataranieta.
Fue una burla para los investigadores, que dejaran a “Una Comadre, haciendo Historia”.
En síntesis, su nombramiento, fue una vil burla.
Es una historiadora “Noña”, frívola, superficial, sin bagaje cultural, dicen sus promotores y el 99 % del personal del Instituto, pero asidua socia del Club Campestre y del Casino Victorense.
Eso es lo de menos, pues hay historiadores empíricos, autodidactas y que han escarbado en los misterios históricos de Tamaulipas y producido obras de interés histórico y sin recursos.
En cambio, en lo que aún llaman Instituto, tienen un presupuesto de 400 mil pesos mensuales para la producción editorial y solo han editado o producido 3 libros en cuatro años, mientras que la UNAM, edita 15 libros por año.
Una diferencia abismal con el gran Maestro Juan Fidel Zorrilla.
Si acaso, se conocen, al revisar el catálogo de libros, La Franja de las Nueces y El Diario del Capitán Berlandier.
¿En qué se ha gastado el presupuesto de 12 millones de pesos en el lapso de cuatro años?
Y todo por la participación política de Nora Hilda de los Reyes como candidata de Morena al Distrito XIV y que vapuleó a su adversaria Pilar Gómez, la ridiculizó en los Foros y por pocos votos pudo haber ganado, se ensañaron contra su esposo, el doctor Pedro Alonso Pérez.
Su esposo, el Contralor de la UAT, Polo Bello, en complicidad con La Comadre Laura, no solo le cerraron su oficina, y no lo dejaron entrar, ni tan siquiera le han notificado que ha sido despedido.
Lo peor del caso, uno de los aberrantes casos de injusticia, también le retiraron el sueldo de catedrático como Maestro en la licenciatura en Historia de la Facultad de Ciencias de la Educación.
No cabe duda que en la Universidad Autónoma de Tamaulipas ni la dirigen los que más saben, ni la administran los más capacitados ni en materia de Historia están los que sí saben.
Mejor mañana nos leemos porque han vapuleado sin misericordia a mi presidente López Obrador.
Me pregunto si hubiera tomado la decisión de la fuerza y la masacre de inocentes, la decisión de los daños colaterales, ¿de qué se estuviera acusando? De de Genocida? ¿¡Asesino!?.
Los “derechairos” deben de esperar tranquilos la respuesta.
¡Yo estoy con AMLO!
P.D. Pensé que solo los priistas eran mapaches y discretos para los fraudes electorales. Los panistas quisieron seguir su ejemplo, pero salieron burdos y amenazantes, pero los Morenos, ante la elección de Delegados ante el Congreso nacional del partido, salieron peor que los priistas y panistas.
La elección en Tamaulipas fue un COCHINERO y los promotores y asesores de Adrián –Oseguera afirman que se consolidó como el único líder de Morena. Pero, ¿líder de un partido que ni siquiera existe? Existe el membrete y puros pillastres priistas.
El verdadero no líder de la elección, de ese cochinero fue José Ramón Gómez, JR., pues se le comprobaron su participación y desvíos de recursos en todos todos los Distritos. Todos los Servidores de la nación, dependientes de la Secretaría del Bienestar operaron para “hacer ganar” a Bertha Luján.
Soy un convencido de López Obrador, pero sus colaboradores, decepcionan y si no hay voluntad política para aplicar la ley, no ganan las próximas elecciones:
¡Qué decepción!!!
