La Cámara de Diputados aprobó por decisión unánime que los consumidores mexicanos sepan con detalle y con claridad los contenidos de grasa, azúcar, sodio, colorantes y otros elementos que pueden dañar su salud.
Ciudad de México, 1 de octubre (SinEmbargo).– Los diputados federales en México hicieron historia este martes, luego de que con 458 votos a favor y sólo dos abstenciones, ya que nadie estuvo en contra, la Cámara Baja, aprobó la reforma de la Ley General de Salud para que etiquetas de alimentos y bebidas industrializadas incluyan información clara de los contenidos dañinos a la salud.
Durante años, y especialmente en los dos últimos sexenios –el del panista Felipe Calderón Hinojosa y el del priista Enrique Peña Nieto–, organizaciones de la sociedad civil, acompañadas por organismos e instituciones internacionales incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS)– lucharon porque en México, un país con los mayores índices de obesidad y diabetes en el mundo, se tuviera un etiquetado claro.
La poderosa industria de la comida chatarra, los legisladores y los gobiernos federales protegieron a los grandes corporativos –casi todos ellos trasnacionales–, por lo que luchadores sociales denunciaron durante años contubernio y corrupción entre funcionarios y empresas, lo que les permitió un negocio de ganancias multimillonarias, sin necesidad de advertir a los consumidores qué es lo que se llevaban a la boca.
Este martes, sin embargo, la Cámara de Diputados, donde la mayoría de los legisladores son de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) dio la espalda a las presiones y aprobó por decisión unánime que los consumidores mexicanos sepan con detalle y con claridad los contenidos de grasa, azúcar, sodio, colorantes y otros elementos que pueden dañar su salud.
Tan solo ayer, autoridades de las Naciones Unidas opinaron que la aprobación del etiquetado frontal de advertencia es urgente para enfrentar la epidemia del sobrepeso y la obesidad en México y no debe ser una medida “tímida”
“Estamos ante una epidemia, es un problema grave y no se vale no hacerle frente”, aseguró en conferencia de prensa Lina Pohl, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La especialista aseguró que era necesario adoptar un etiquetado frontal de advertencia que sea claro y de fácil comprensión, pues “se tiene evidencia científica de que el etiquetado es una de las medidas más efectivas para reducir los índices de sobrepeso y obesidad”.
Fuente:Sin Embargo