Tamaulipas vive hoy una calma chicha que, como en los pronósticos del tiempo, presagia posibles días difíciles…
Momentos que ojalá y no sean muy amargos, ante lo que estará en juego en la entidad y que será: nada más y nada menos que la próxima gubernatura del Estado.
En el juego del ajedrez político, nadie ha movido sus piezas, a pesar de que la contienda comenzó desde el primer día de la administración azul; bueno, al menos en apariencia no se han movido, pero la verdad es que los presuntos prospectos para suceder al Gobernador Cabeza de Vaca, cada quien ha picado piedra a su manera, cuidando no hacer mucho ruido en la tarea.
Nada, absolutamente nada de lo que pasa en la entidad, está ajeno a la sucesión gubernamental, incluyendo algunos asuntos relacionados con hechos criminales y cambios en el aparato administrativo del actual régimen panista.
Los que saben de enchiladas dicen que por lo pronto, el delfín del Gobernador es nada más y nada menos que el Diputado Local Gerardo Peña, del tal manera que si este año fueran las elecciones, éste sería el candidato del partido azul.
Sin embargo, las huestes morenistas vendrán con todo para disputar de tú a tú el cargo político más importante de la entidad, a pesar de las pugnas internas que se traen por la dirigencia nacional de su partido.
Seguro que sabrán aprovechar la circunstancia de que su creador es ahora el Presidente de la República, quien hoy cuenta con más del 70 por ciento de aprobación a su mandato y eso se traduce en preferencias electorales.
En fin, ojalá y en Tamaulipas no se forme un huracán político dentro de dos años y eche a perder la tranquilidad que hoy se respira, al menos en el sur de la entidad.
EN ALTAMIRA HAY INTELIGENCIA
Reza un proverbio chino que “regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día; mejor enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida”.
En Altamira, la administración municipal que preside la señora Alma Laura Amparán Cruz, inició recientemente un programa tendiente a capacitar a niños de las escuelas ribereñas en las artes de la pesca, con el fin de que sepan aprovechar la riqueza piscícola de la región lagunera y del Río Tamesí.
Niños de las escuelas José María Morelos y Adolfo López Mateos de las comunidades El Repecho y Vega de Otates, respectivamente, recibieron la charla “Normatividad Pesquera”, donde les mostraron todos los secretos de cómo lograr una mejor pesca, para después involucrarlos en una sesión de preguntas y respuestas, a manera de entrenamiento.
Este programa será llevado a todas las comunidades ribereñas de Altamira, lo que coloca a la administración de la señora Alma Laura Amparán Cruz, en sembradora de actitudes positivas en la niñez y la juventud, que quizá algún día se convertirán en industriales de la industria pesquera.
A eso yo le llamaría un programa inteligente, cargado de un alto sentido social.
P.D.- Dar es bueno, enseñar es mejor.
e-mail: armando_juarezbecerra@hotmail.com
