Pero no han tenido para pagarle impuestos a Ciudad Madero…
Por Jesús Bravo.
El TM Futbol Club, organización deportiva perteneciente al Grupo Orlegui, propietario del equipo Santos Laguna que milita en la Liga MX, acaba de entregarle al municipio de Tampico un recién remodelado estadio olímpico de la Unidad Deportiva (Unidep) que, según lo dicho por el alcalde porteño Chucho Nader hace apenas un par de días, fue restaurado a plenitud por cuenta de la empresa que tiene a una escuadra futbolera jugando con la camiseta albiceleste en el Ascenso, la división por la cual se accede al máximo circuito del balompié mexicano.
Es tarde, en la que todo era felicidad para los directivos del club que tiene como sede al estadio Tamaulipas, se anunció también que a partir de tal fecha se empezaba a utilizar ya el referido campo olímpico de la Unidep Tampico para las prácticas del equipo cuyo nombre popular es la Jaiba Brava, ya que en eso consistía el convenio de colaboración con el gobierno municipal, a través del cual se realizó la inversión privada.
Nader Nasrallah detalló las áreas de la mencionada instalación deportiva municipal en cuya remodelación invirtió el club de futbol TM (Tampico Madero): la cancha y su restauración a base de pasto natural; los vestidores de ese estadio; la reparación del graderío; la dotación de sillas; y la colocación de 15 luminarias de 1,500 watts alrededor del campo.
Justo al día siguiente de ese acto público efectuado en Tampico, en Ciudad Madero eran clausuradas, sólo a unos pasos del territorio tampiqueño, las puertas de acceso al estadio Tamaulipas, que está colocado simétricamente por mitades en ambas ciudades, gracias a la magia política y el gran poderío e influencia que tuvo en su tiempo el ahora difunto exlíder petrolero Joaquín Hernández Galicia, en cuyo período de esplendor fue construido el coso de la colonia Unidad Nacional.
Hay quienes afirman que en aquel entonces, y de acuerdo con lo que se aprecia claramente en los planos de esta conurbación, la división político territorial fue modificada para que tal reparto equitativo del inmueble pudiera ser realidad, y ahora tanto los dueños del estadio como quienes lo arriendan tienen que pagar impuestos municipales tanto lo mismo en Tampico que en Ciudad Madero, cuyo gobierno municipal reclama ahora el pago de cuentas atrasadas por concepto de la venta de boletos, lo que acabó siendo el motivo de la clausura de las puertas que dan al territorio maderense.
