A sus cinco meses de gestación, sufre de dolores, acude al IMSS, le dan unas pastillas en una bolsa, la dan de alta y en horas regresa, pero su bebé muere
Nuevo Laredo.- Adriana tenía cinco meses de gestación.
El domingo en la noche, sintió un fuerte dolor en su abdomen; temerosa por la salud de su bebé, decidió acudir al Hospital del Seguro Social, para que la revisaran.
A los pocos minutos, Adriana y su tía llegaron al hospital -al de la “bandera”, como lo conocen- y de inmediato pidieron la intervención de un médico.
El dolor no cesaba y de inmediato la ingresaron con una doctora, quien tras un breve chequeo le dijo que ya tenía dilatación.
De pronto, le dieron una mala noticia: la doctora dijo que era muy probable que su hijo no se lograra. Aún con el diagnóstico, Adriana no perdió las esperanzas.
Después de un rato, la doctora le dio medicamento para el dolor y unos supositorios, que según Adriana, venían sueltos, en una bolsa transparente.
Con el corazón destrozado, la mujer regresó a su casa y se suministró el supositorio, ya eran alrededor de las 11:30 de la noche.
Casi de inmediato de administrarse el supositorio, Adriana tuvo la necesidad de ir al baño. Dentro, volvió a sufrir el fuerte dolor, pero este vino acompañado de sangre.
Al ver lo que pasaba, Adriana le dijo a su tía que la llevara de nuevo al hospital, ella le puso a una cobija, cuando llegaron, el producto ya estaba fuera.
Le confirmaron la mala noticia: ya no tenía signos vitales.
De estos hechos tomó conocimiento personal de la Policía Investigadora, se desconoce si se habría de investigar el caso.
Fuente: el Mañana de Laredo
