¿Engaños?
Maremágnum / Mario Vargas Suárez
Uno de los problemas de esta época es precisamente como el título, pues con la excusa que me diga, desde hace un tiempo y por el anonimato que permiten las redes sociales, la población es muy susceptible de ser engañada.
En otras palabras. Hay excesiva incredulidad ciudadana en muchos aspectos y mayormente cuando se trata de temas de gobierno del color que me diga y lo peor, el engaño permea entre la población.
Ayer en este espacio publiqué el papel de los meteorólogos y los pronósticos que hacen del estado de tiempo. Lo que no dije fue que la palabra pronóstico también puede significar predicción, vaticinio, augurio, presagio… en otras palabras y en castellano común: puede entenderse como “a la mejor”.
La creatividad de los mexicanos en esta era digital ha hecho ‘memes’ -hay quienes llaman caricaturas cibernéticas- hasta de los hombres y mujeres que en la televisión hablan de los pronósticos del clima, como los que se han publicado de Abimael de Multimedios.
El caso es que Don Pedro Hernández, titular de Protección Civil de Tamaulipas, entregó el reporte de lo que a él le informaron y las autoridades de educación por seguridad de los escolares hasta el nivel superior, suspendieron clases en 21 de los 43 municipios del estado, los días miércoles 4 y jueves 5 de septiembre como críticos para la seguridad de los escolares.
Uno de los conflictos del miércoles por la mañana los telenoticiarios señalaron es que se habló de municipios donde la suspensión de labores era parcial, sin especificar, lo que ocasionó caos entre la población escolar, profes y padres de familia.
Adicional al descontrol del Comunicado Oficial de la SET, el jueves 5 de septiembre amaneció completamente limpio de agua, de tal forma que la población empezó a llamar a los noticieros en televisión y radio para saber si se mantenía la alerta o las escuelas se abrían sus puertas.
El silencio imperó en la mayor parte de los casos, no hubo aclaraciones oficiales y quienes pudieron llevaron a sus escolares a las instituciones, pero muchas de ellas se encontraron cerradas… No con tres candados, como dice la canción.
No pretendo responsabilizar a ningún funcionario federal, estatal o municipal, de la desorientación de acudir o no a la escuela. No es la intención.
Más bien es la evaluación de los hechos y quizá el cambio de acciones, que estoy convencido siempre fue para salvaguardar la integridad de los habitantes en las zonas con posibles afectaciones.
Quizá la confiabilidad en los aparatos que estudian estos fenómenos, o el profesionalismo actualizado de los recursos humanos, fueron la causa del descontrol en la información que la población recibió.
Hago la reflexión, sobre todo porque se debe considerar que los tamaulipecos y los mexicanos estamos agotados de la desinformación, de los engaños, de las declaraciones fatalistas, de no hablar con la verdad.
Los protocolos en estos casos me parece deben actualizarse para que, a quienes les corresponde hacer declaraciones públicas, lo hagan con la confianza de ser lo suficientemente convincentes, de ser asertivos en lo que dicen frente a los micrófonos.
Multimedios, Tv Azteca y Televisa, las tres televisoras con telenoticieros matutinos en Tamaulipas, no acertaron en la orientación pública, incluso hubo la transmisión de mensajes donde algunos profesores animaban a los estudiantes a no asistir al plantel y otros, avisando lo contrario.
Padres de familia, estudiantes y profesores fueron las víctimas de este caos de la desinformación ¿equivocada?
Reitero: La población necesita creer, urge que la gente esté convencida de que una autoridad puede hablar con la verdad, aunque sea en esto.
Fuente: Red Tampico