De grito a gritos…
Rosa Elena González
Mañana 15 de septiembre es un día muy especial, se recuerda el Grito de Dolores y nuestra Independencia, por eso hoy los colores patrios se ven en todos lados, se siente el orgullo de ser mexicanos.
La historia marca que la lucha por la independencia de México se inició con el cura MIGUEL HIDALGO Y COSTILLA llamando a su pueblo para levantarse en armas, sus seguidores iban con más alma y fe que armamento pero salieron a las calles a pelear por una mejor nación, el acto se celebró en Dolores, Guanajuato, y se concreta a un grito de consignas contra el mal gobierno.
Acompañado de IGNACIO ALLENDE y JUAN ALDAMA, con el estandarte de la virgen de GUADALUPE en la mano, HIDALGO incitaba a la lucha para que el pueblo mexicano tuviera mejores oportunidades de vida.
Hoy la historia es diferente aunque parece la misma, el Grito de Dolores solo se escucha el 15 de septiembre cuando nos sentimos más mexicanos que nunca, el fervor patrio nos estremece y el grito, el clamor diario del pueblo, también es por culpa de los malos gobiernos que se han tenido.
Los mexicanos de ahora necesitamos ver a nuestro país libre pero el enemigo parece más fuerte, el yugo opresor es empujado por del miedo, desempleo, corrupción, impunidad, crisis e inseguridad.
Para que tengamos la nación que requerimos, que MEXICO sea el mejor lugar para vivir, donde se respire paz y tranquilidad, donde sea más fuerte el amor a la tierra y las convicciones que los intereses partidistas o de grupos, donde el pueblo admire y respete sus líderes porque cumplen con el compromiso social falta mucho, muchísimo.
Más que ver los frutos del movimiento independentista lo que se observa en estos momentos es la urgente necesidad de una revolución pero no con armas, porque estas ya han demostrado que solo destruyen y no construyen, que mutilan, lastiman, matan, y no dan de comer, lo que se requiere es que la lucha por la independencia sea de ideales, propositiva, que todos nos pongamos de pie, empuñemos nuestro coraje para salir adelante, luchar por nuestros sueños y seamos participes de la independencia y engrandecimiento de nuestra nación.
Urge que cada quien, desde su trinchera, arme sus ejércitos con ideas, iniciativas, trabajo en conjunto, que exijamos a los gobernantes cumplan con el compromiso de velar por la ciudadanía, sean verdaderos líderes, estimulen y recompensen el trabajo digno de los mexicanos.
Claro que esto solo sucederá con la participación de todos y que los recursos para la educación, el desarrollo social, la seguridad se apliquen en forma correcta, que se tengan empleo, mejore la economía nacional y el pueblo tenga mejor calidad de vida. Nuestro país es inmensamente rico en recursos naturales pero nada de eso se nota en el bolsillo del mexicano.
Por eso es que el campo necesita mayores apoyos para que los campesinos no abandonen su tierra y emigrar a la ciudad en busca de un empleo que les dé suficiente sueldo para darle de comer a su familia, también el profesionista requiere de espacios para desarrollar su profesión de acuerdo a sus aptitudes, conocimientos y destrezas, pero que igual en esa misma tesitura sea su remuneración, o que el empleado atienda su encomiada con responsabilidad, que en el hogar se fortalezcan los valores, que las instituciones cumplan con su responsabilidad sin distraerse en cuestiones políticas.
Cuando todo eso suceda el grito de Dolores quedará solo plasmado en la historia, habremos de alcanzar una verdadera independencia social y económica que dará suficientes fuerzas para que todos gritemos con orgullo y fervor patrio VIVA MEXICO.
Fuente: La Verdad Tamaulipas