Como no ha habido reforma institucional, resulta que el Estado que respondió al asalto armado y agresivo de jóvenes guerrilleros el 23 de septiembre de 1965 quienes asesinaron a tres militares es el mismo Estado que premió de manera institucional a dos sobrevivientes de aquella agresión.
Sin embargo, parece también que el mismo Estado se ha olvidado de los militares asesinados en un asalto guerrillero armado contra un cuartel de las fuerzas armadas constitucionales. A nivel gubernamental nadie del gobierno de la 4T ha reconocido el papel de militares caídos en defensa de las instituciones.
En todo caso, el propio ejército ya había agradecido en el 2004 el papel heroico de los militares en el Cuartel Madera de Chihuahua con dos pequeños monumentos.
Uno de ellos dice:
“El ejército mexicano rinde homenaje a los soldados que murieron el 23 de septiembre de 1965 defendiendo las instituciones nacionales de la intransigencia, la agresión, la infidencia y la traición.”
Y otro recuerda a los tres caídos:
Teniente de infantería Marcelino R. Aguilar M., sargento segundo de infantería Nicolás Estrada y sargento segundo de transmisiones Virgilio Llanes G.
Aquel asalto al Cuartel Madera fue el inicio de la declaración de guerra revolucionaria armada de jóvenes radicales que pertenecían al Partido Comunista Mexicano, que tuvieron cuando menos dos décadas de enfrentamiento, que fueron derrotados hasta 1982 y que quisieron resurgir con el EZLN y su alzamiento armado el 1 de enero de 1994.
El homenaje institucional del gobierno lopezobradorista a dos sobrevivientes del asalto al Cuartel Madera fue una falta de respeto al ejército que en 1965 se defendió de un ataque armado de una guerrilla radical que quería derrocar por las armas al gobierno constitucional e imponer un gobierno socialista tipo cubano.
El factor guerrilla se presenta como un sobresalto para el gobierno de López Obrador porque recuerda uno de los más graves conflictos que ha atravesado la vida nacional desde 1965: la guerrilla armada en declaración de guerra contra el gobierno federal para derrocarlo e instaurar un gobierno socialista tipo cubano. La guerrilla atacó al ejército, secuestró diplomáticos y funcionarios, propicio la muerte de un líder del empresariado de Monterrey, intentó plagiar a la hermana de un presidente de la república y secuestró al suegro de otro y se ha desarticulado en grupúsculos de presión.
El asalto al Cuartel Madera como réplica del asalto castrista al Cuartel Moncada como inicio de la revolución cubana nunca definió en México el papel de la guerrilla, se convirtió en la Liga Comunista 23 de Septiembre y ésta derivó en un grupo violento que condujo a la aniquilación de todos los movimientos armados guerrilleros.
El problema radica en que el simbolismo de la Liga Comunista 23 de Septiembre estaría definiendo el perfil político del gobierno de la 4T.
Tocado. El nuevo presidente del PRI Alejandro Moreno Cárdenas Alito quedó tocado con la información filtrada de una investigación sobre sus propiedades inmobiliarias. Y no debe olvidarse que la indagatoria fue impulsaba por el exgobernador oaxaqueño Ulises Ruiz Ortiz como parte de la lucha por la presidencia partidista. Aunque no quiera reconocerlo, Alito quedó muy lastimado y su respuesta dejó más dudas. A ello se agrega el hecho de que Alito resultó atrapado en las redes de grupos de poder peñista en el PRI. Y Ruiz Ortiz quedó revalidado ante los priístas que cayeron en la demagogia del nuevo y desgastado dirigente nacional priísta.
Política para dummies: La política es la fuga de la memoria.
